En la inmensa mayoría de los casos, para los accidentes de tráfico provocados por animales silvestres no hay ninguna indemnización. El propietario del vehículo siniestrado tiene que hacerse responsable de los desperfectos. Pero hay excepciones. Y una es la Diputación de Pontevedra, a quien el Tribunal Supremo acaba de ratificar una sentencia que le condena a pagar 3.067 euros de indemnización a una conductora cuyo vehículo quedó dañado tras atropellar a un jabalí.

El accidente se produjo el 4 de febrero de 2007, en la carretera EP 7201 (Cachafeiro-Silleda), de la que es titular la Diputación de Pontevedra. La propietaria reclamó una compensación por responsabilidad patrimonial y un juzgado de Pontevedra le dio la razón y condenó a la corporación provincial a pagarle 3.000 euros. La sentencia encontró a la Diputación de Pontevedra responsable por no señalar ese tramo de la carretera con una señal de tráfico que alertara el paso de animales.

La corporación provincial no aceptó la sentencia y presentó un recurso ante el Tribunal Supremo, argumentando que por ese tramo de la carretera no se habían producido más accidentes y que tampoco era un paso habitual animales. Pero sus apelaciones no convencieron al Supremo, que en una sentencia del pasado 26 de febrero ratifica la indemnización a la conductora y además condena a la Diputación al pago de las costas del juicio, otros 3.000 euros.