Sin opción, como las empresas convencionales o los bancos, para ampliar capital con la entrada de socios y el lanzamiento de acciones, las cajas de ahorros se nutren de fondos a través de los mercados internacionales de financiación y la emisión de deuda en forma de bonos o cédulas. Las entidades reciben dinero prestado y tienen que devolverlo. Sobre los vencimientos se ha puesto en estos últimos días la lupa del debate de la fusión que la Xunta busca para las entidades gallegas y las dudas sobre si una de ellas está mejor que la otra, y si Caixanova está suficientemente capacitada para seguir adelante con sus planes alternativos. Por si quedaba alguna duda, la entidad que preside Julio Fernández Gayoso daba ayer un golpe sobre la mesa con la difusión de sus datos sobre liquidez. Su conclusión: la caja viguesa cuenta en estos momentos con fondos suficientes para hacer frente a todas sus emisiones mayoristas hasta 2020.

Una posición de "liquidez total", resume la entidad. "Sólo en el último año –añade en un comunicado– ha mejorado en 1.214 millones de euros". ¿A cuánto ascienden los vencimientos de Caixanova? A un total de 6.288,45 millones de euros hasta 2020. La deuda que vence este año y que, por tanto, hay que reembolsar o refinanciar en los próximos meses, es de 677,60 millones. Otros 925,05 millones en 2011 y 1.992,55 en 2012. El resto, 2.693,25 millones se reparten entre 2013 y 2020.

Hoy la caja tiene 736 millones de euros en lo que habitualmente se llama efectivo. Pero, además, Caixanova tardaría sólo "entre uno y tres días" en hacerse con otros 3.007 millones. Liquidez "inmediata", que definen en el sector, con una póliza para descontar en el Banco Central Europeo, una cartera de renta fija "disponible para vender en contado" de 544 millones; otra de renta variable de empresas cotizadas valorada en 1.024 millones e inversión en fondos líquidos de 110 millones.

"Si a ese importe –continúa la caja– se le suman los depósitos prestados a entidades financieras con vencimiento inferior a seis meses, la parte no dispuesta del recurso a la financiación con aval del Estado para emisión de obligaciones simples y la capacidad disponible de emisión de cédulas hipotecarias, resulta una posición de liquidez total a corto plazo de 6.314 millones de euros". Un volumen que representa más del 24% del activo de la caja, "muy superior al que poseen en estos momentos la mayoría de las entidades financieras españolas".

Para asumir los vencimientos de los próximos dos ejercicios, la entidad espera que no sean necesarias nuevas operaciones en los mercados mayoristas y compensar la deuda con el crecimiento en depósitos de clientes.

Así que la dirección de Caixanova niega rotundamente que su negocio esté "en absoluto" condicionado por la financiación captada en mercados mayoristas. El total de recursos de clientes en los últimos doce meses se ha incrementado en 1.900 millones. El nivel de cobertura sobre los créditos concedidos se elevó hasta el 125%, lo que suponen 8,7 puntos de mejora del indicador, uno de los que mide la liquidez. "Dato –insiste la entidad– que contribuye a consolidar la favorable posición de Caixanova de cara al futuro".

A la espera de conocer los resultados al cierre del pasado ejercicio, los últimos balances públicos completos de las cuentas de las entidades de ahorro gallegas –entre enero y septiembre de 2009– juegan a favor de la posición adoptada por Caixanova. Sólo esta entidad, sin contar sus firmas participadas, ganó más que todo el grupo Caixa Galicia. 81 millones frente a 77,4. La diferencia es todavía más grande en la comparación de los dos resultados consolidados. El grupo vinculado a la entidad viguesa tuvo un resultado hasta el tercer trimestre de 107,6 millones, un 28% más que el de la caja coruñesa, pese a ser 1,5 veces más pequeña y tener un margen de intereses mucho menor acorde con su tamaño, de 380 millones mientras que el de Caixa Galicia alcanza los 529.

Dos de los principales termómetros de la solvencia también le dan la razón. El Ratio Bis, que calcula los recursos propios computables sobre el total de activos ponderados por riesgos, se sitúa en el 11,8%, siete décimas por encima del de Caixa Galicia, que tiene una mayor tasa de morosidad, del 4,92% frente al 4,75% de Caixanova.

El PP sostiene que un SIP es sólo una fusión a largo plazo

El portavoz del PPdeG, Antonio Rodríguez Miranda, aseguró ayer no entender por qué el líder del PSdeG, Manuel Vázquez, y el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, siguen "empeñados en imponer" fórmulas que dejen a Galicia "sin cajas" y subrayó que, mientras tanto, Ferraz –la sede nacional del PSOE– "se frota las manos con su torpeza y peso nulo".

Miranda subrayó que el Sistema Institucional de Protección que defiende el PSdeG no representa más que "una fusión a largo plazo" que podría sacar de Galicia "los centros de decisión", "cerrar" oficinas centrales que hoy son "patrimonio de Galicia" y apartarla "del mapa financiero estatal". "Ser político en Galicia debería significar estar al servicio de la comunidad", censuró.

El PSOE acusa al Gobierno gallego de "forzar la fusión"

El secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, detecta una "estrategia" del PP para "forzar una fusión" entre las cajas gallegas con el objetivo de "entregar todo a Caja Madrid", y advirtió que los populares "están anteponiendo los intereses del partido" al los de los ciudadanos.

El líder socialista parafraseó al secretario de Economía y Empleo del PP, Álvaro Nadal, para asegurar que "la fusión es engordar para morir" y cuestionó la auditoría encargada a KPMG para evaluar si la unión de Caixanova y Caixa Galicia resulta solvente, porque, recordó, la persona que emitirá los informes es Elena Pisonero, ex diputada del PP y una persona de la confianza de Rato, que será el próximo presidente de Caja Madrid.

El Bloque exige a Feijóo que haga la unión "sin vacilaciones"

El portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, reiteró ayer la posición de su partido favorable a una fusión entre Caixa Galicia y Caixanova para lograr una caja gallega y advirtió al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que es tiempo de "decisiones" y no "de vacilación", tras admitir que si la unión no resulta solvente, se plantearán otras opciones.

"El presidente debe optar de una vez por todas y sin ninguna ambigüedad por la fusión, en vez de sementar dudas al respecto", apeló el dirigente nacionalista.

En cuanto a las declaraciones de Mariano Rajoy sobre las cajas, Guillerme Vázquez sostiene que la clave de la postura del líder del PP es que apuesta por la bancarización de las cajas.