La autopista entre Orurense y Santiago permaneció ayer cortada durante nueve horas en el término municipal de Punxín debido a un desprendimiento de toneladas de tierra y piedras de un talud. El siniestro se produjo a las seis de la mañana en la AG-53, entre los kilómetros 80 y 85, en dirección a la capital gallega.
Un vehículo que circulaba a esa hora por el vial colisionó contra los restos del talud, pero su conductor resultó ileso y fue él mismo quien dio la voz de alarma sobre lo sucedido.
El siniestro obligó a habilitar itinerarios alternativos y la circulación no se restableció hasta las 15 horas, tras habilitar doble sentido de circulación en el carril en dirección a Ourense.
A las 19.45 horas, la Guardia Civil ya pudo abrir al tráfico uno de los carriles en sentido Santiago afectados por el alud y dejar sin efecto el doble sentido.
La recogida de todos los restos caídos sobre la calzada podría prolongarse varios días. Según las primeras valoraciones de los técnicos de la Xunta, el derrumbe podría deberse a las persistentes rachas de lluvia y viento de los últimos días.
