La vicepresidenta económica del Gobierno de España, Elena Salgado, ha pedido "prudencia" al secretario xeral de los socialistas gallegos, Manuel Vázquez, en el debate abierto sobre el futuro de las cajas gallegas. Así lo desveló la secretaria de Política Municipal del PSdeG, Mar Barcón, en una reunión del grupo parlamentario del PSOE gallego.

En el transcurso de un "tenso debate" sobre si el líder de la oposición debe tomar partido a favor o en contra de una fusión de Caixanova y Caixa Galicia, la portavoz de la dirección del PSdeG dijo que Salgado había reclamado a Vázquez, ausente en la sesión de trabajo, que "esperara" antes de hacer pública su postura, confirmó a este diario un diputado presente. Otro corroboraba las declaraciones de Barcón: "Salgado pidió a Pachi que sea prudente y hable lo menos posible, según contó Mar". Un tercero interpretaba las palabras de Barcón así:"La vicepresidenta pidió a Vázquez que se callara".

El silencio exigido por Salgado tiene sus partidarios, pero también sus detractores. En la reunión del miercoles, se abrió, según parlamentarios presentes, un debate al respecto, a iniciativa de Ismael Rego, que fue portavoz del Grupo parlamentario del PSdeG en la anterior legislatura. María José Caride, que fue conselleira con Touriño, José Manuel Lage, quien disputa la secretaría provincial del PSdeG de A Coruña a Salvador Fernández Moreda, o el pontevedrés Guillermo Meijón, también defendieron la conveniencia de que la ciudadanía conozca la opinión del PSOE gallego. Advertían de que si el partido no toma la iniciativa corre el riesgo de dar la impresión de que le marcan el camino desde Madrid, o Feijóo o el Bloque, el único partido que se ha pronunciado a favor de la fusión de Caixanova y Caixa Galicia.

En cambio, Mar Barcón y el vigués Abel Losada sostuvieron lo contrario, según fuentes socialistas. ¿Para qué mojarse cuando el propio presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se mueve en la indefinición?, argumentaron. ¿Qué opinar cuando el partido ignora la situación real de las cajas gallegas y se puede equivocar apostando porque haya o no haya fusión?, se preguntaban Barcón y Losada. También el ex conselleiro José Luis Méndez Romeu justificó que lo mejor es esperar a que mueva ficha el Banco de España.

El debate sirvió para comprobar que una hipotética fusión de Caixa Galicia y Caixanova divide a los socialistas gallegos. Sólo un diputado se pronunció el miercoles a favor. Fue José Manuel Lage, aunque fuentes del PSdeG apuntan que Mar Barcón y Xaquín Fernández Leicega, también de la provincia de A Coruña, Rego, de Lugo, y Caride, de Vigo, apuestan por la unión de las dos entidades, y así lo han manifestado en reuniones socialistas. En cambio, los vigueses Abel Losada y Manel Gallego defienden que lo mejor es no mudar el mapa actual. Manuel Pose, secretario provincial del PSOE en Pontevedra, compartió criterio con Losada y Gallego, pues el miercoles dijo no ver cuáles son las ventajas de la fusión para la comunidad.

La división no sólo reina en el grupo parlamentario. En la escena local, las opiniones también son dispares. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ya ha avisado de que se movilizará en contra de la fusión, mientras que el de A Coruña, Javier Losada, apuesta por ella, siempre que las sedes de la nueva entidades se concentren en su ciudad. En el PSOE interpretan ambos posicionamientos en clave electoral.

¿Y la dirección del PSdeG qué piensa? Manuel Vázquez se enfrenta a un dilema, y lo sabe, no quiere a equivocarse en una cuestión de país, y corre ese riesgo, pues no maneja información clave, pero tampoco quiere quedarse descolgado y salir a la palestra cuando ya se hayan pronunciado los Gobiernos de Galicia y España. El secretario xeral pretende que Feijóo pacte con el PSdeG una postura común, explican fuentes próximas a Vázquez.

Entre tanto, se mueve en el plano de la discreción, pero el miercoles en el Parlamento el Bloque lleva el futuro de las cajas a debate, y el PSdeG, igual que el PP, habrá de posicionarse. Desde el PSOE apuntan que seguirán apostando por la prudencia, insistiendo en que la galleguidad de las cajas debe mantenerse a toda costa, pero sin ir más allá. Igual que Feijóo, quien insiste en "dos cajas o una caja gallega fuerte", pero nunca "una absorción", como explicó a FARO en verano. En el caso de que el futuro pase por qué Caixanova y CaixaGalicia sigan caminos separados, el presidente de la Xunta no descarta una SIP, alianza en la que las entidades mantienen su personalidad jurídica, con cajas de fuera,pero siempre para reforzar posiciones en la escena estatal, y sin perder galleguidad.