El auto del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que suspende cautelarmente el concurso eólico del bipartito ha dado mucho aire a la actual Xunta, que aún siendo provisional el pronunciamiento judicial, encuentra nuevos argumentos "clarificadores y tranquilizadores" en los que apoyarse para dar mayor "impulso" al nuevo modelo eólico que está elaborando y que supuso, hace ya dos meses, dejar sin efecto temporalmente la adjudicación de parques del anterior Gobierno. El Ejecutivo gallego no recurrirá la resolución, para lo que tiene de plazo hasta el próximo 6 de octubre.

La resolución judicial, según fuentes del sector, "hace un gran favor a la Xunta" porque le franquea las puertas a la anulación definitiva del concurso del bipartito. "Es un tremendo espaldarazo", sostienen otras fuentes. La razón es que en cuanto el Gobierno gallego saque adelante la ley que regulará el negocio del viento y proceda a liquidar definitivamente el reparto eólico del Ejecutivo anterior, algo previsto para principios del próximo año, los recursos presentados en el TSXG –incluido el que dio origen al auto de suspensión– tanto contra la orden que fijó los requisitos como contra el reparto en sí de los 2.300 megavatio, decaerán.

"La única condición es que la ley se apruebe antes de que haya otro pronunciamiento judicial y por los plazos que se manejan, parece que va a aser así", aseguran desde el sector eólico.

El auto en sí y que no se haya pedido fianza a la empresa que presentó el recurso por suspender el reparto, según fuentes de la Xunta y de varias empresas eólicas, sugiere que el juez cuenta con razones de peso que le hacen dudar sobre la legalidad del proceso. "El hecho de que el TSXG no exija fianzas al demandante, hace que el auto sea todavía más rotundo. El tribunal nos está refrendando, refuerza nuestra posición y nos da la razón", afirmó el conselleriro de Economía e Industria, Javier Guerra.

"Pensábamos que había vicios de legalidad infranqueables en el concurso eólico y el pronunciamiento del tribunal viene a considerar que esos vicios pueden existir", valoró el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en una visita oficial a Lugo. En este sentido, se felicitó porque su Gobierno se hubiera anticipado en dos meses a la resolución judicial y que los argumentos coincidan con los informes elaborados por la Asesoría Xurídica de la Administración autonómica.

"El auto clarifica, tranquiliza e impulsa al Gobierno actual para abordar un nuevo concurso con seguridad jurídica y viabilidad económica", aseguró Feijóo.

Con el refuerzo del auto, la Xunta coge nuevos bríos para elaborar su modelo eólico y llevarlo al Parlamento antes de que acabe el año o a principios de 2010 para relanzar el sector. Fuentes del Gobierno gallego aseguran que el calendario previsto no se va a alterar. Es más, consideran que el auto "ampara aún más si cabe, la decisión de la Consellería de Economía" de dar carpetazo al concurso del bipartito.

No obstante, las mismas fuentes del Ejecutivo admiten que tendrán que hacer frente, como así ya se lo hizo saber el sector, a "numerosos y variados" recursos "debido a la cantidad de intereses muy complejo en juego". Los beneficiados por el proceso de adjudicación del bipartito recurrirán la anulación del concurso y otros denunciarán el nuevo modelo, sobre todo por la imposición del canon que tendrán que pagar los promotores por cada aerogenerador instalado.