Pilar Farjas llega a su cargo “ilusionadísima” y con la crisis en la mente a falta de presupuesto, mejorar la gestión será la clave en su departamento, en el que, advierte, habrá cambios. Tras reunirse con su predecesora en el cargo, María José Rubio Vidal, quien la definió como de “muy competente” al hacer el traspaso de poderes, la nueva titular de Sanidade avanzó que su departamento trabajará con dos “puntos de referencia”: los usuarios, que serán “siempre el foco de interés”, y los profesionales, a quien definió como “piezas claves” para que esto sea así.

En esta línea, se mostró “convencidísima” de que su departamento contará con la colaboración de todos los profesionales de la sanidad para “poner en marcha los motores y salir adelante en una coyuntura económica en la que las circunstancias no van a permitir solventar económicamente los problemas”.

Así, Farjas aseguró que esta será “una etapa de acuerdos, de consenso, de colaboración y de participación” en la que se abordarán retos como la reducción de listas de espera, la innovación en materia sanitaria y la creación de nuevos hospitales. Todo ello, insistió, con los límites que impone la crisis económica y la consiguiente limitación de recursos. Farjas resaltó que el reto es “seguir mejorando y crecer en sanidad y para ello se necesita la cooperación de los profesionales”.

-¿Cómo afronta el cargo?

-Es un reto profesional y político, porque la sanidad es uno de los pilares del Estado de bienestar y nos afecta a todos. Estoy muy ilusionada y preparada para trabajar con esfuerzo y austeridad, porque está claro que la crisis nos obligará a mantener la prudencia y el rigor en el gasto. Dado que no vamos a poder contar con más presupuesto, habrá que mejorar la coordinación y la gestión.

-¿Cambiará el organigrama de la consellería?

-Es muy pronto para eso. En los próximos días se concretará el equipo y la organización. Sólo puedo decir que la tónica de austeridad que tuvo Feijóo al reducir el número de consellerías y concentrar sus competencias también se aplicará en toda la estructura de mando de la Consellería de Sanidade. Hay que reducir los gastos de gestión.

-¿Cuáles son sus prioridades?

-Habrá nuevas iniciativas contra el colapso de urgencias, y también es fundamental resolver el problema de las listas de espera, no sólo mediante conciertos y peonadas, sino a través de la gestión. Y es que el primer gran reto es mejorar la organización del sistema, dando más autonomía para los profesionales, más capacidad de gestión y más reconocimiento. En cualquier caso, primero debo analizar cuál es la situación de partida, cómo está la demanda de pruebas, de listas o de proyectos pendientes, como el hospital de Vigo, los planes funcionales o las redes de centros de salud. Y contaré con los colegios profesionales, las organizaciones sociales y, por supuesto, los sindicatos.

-Después de varias experiencias en sanidad tanto en la Administración central como en la autonómica, ha pasado los dos últimos años haciendo política municipal en A Coruña. ¿Cómo valora su paso por el Ayuntamiento?

-Ha sido el complemento perfecto. Siempre se dice que todos los políticos deberían pasar primero por la actividad local, y es totalmente cierto. A mí me ha dado una visión más próxima al ciudadano, y he podido conocer los tremendos esfuerzos que están haciendo las corporaciones locales en materia de sanidad.