Pablo Egerique lleva cinco años en el cargo, pero asegura que no está cansado y que aspira a que el nuevo Gobierno del PP lo mantenga como presidente del Consello Económico e Social. Por eso, se mantiene cauto al opinar sobre cuestiones políticas, al tiempo que defiende su “independencia” al frente de este organismo. De lo que sí está seguro es de que la economía gallega aún no ha tocado fondo y que el paro subirá “irreversiblemente”.

-- Estamos en plena crisis y hay un cambio de gobierno. ¿No parece buen momento para cambiar las estrategias económicas?

- Es difícil de decir. La crisis está siendo tan profunda y tan prolongada que la Xunta tiene cosas que hacer, pero siempre dentro de una política nacional y ya veremos las primeras medidas que adopta el nuevo Gobierno: si el cambio es muy grande o menor con respecto a la política anterior. Yo desde mi cargo no puedo pronunciarme.

-- Los empresarios se quejan de que debido al traspaso de poderes hay un parón que frena la actividad económica...

- El traspaso ha de hacerse rápido. Cuanto antes se pase de este impass de ahora con un Gobierno en funciones que tiene limitadas sus actuaciones pues mejor.

-- ¿Seguirá subiendo el paro?

- A nivel nacional, se barajan porcentajes mucho más elevados que en Galicia. En estos momentos las circunstancias no pintan bien para que haya una rápida creación de empleo y en consecuencia descienda el porcentaje de parados. Este año yo creo que se va a aumentar. ¿Cuanto durará esto? Eso ni los gurús lo saben. Ojalá dure lo menos posible. La economía gallega, aunque ha resistido mejor, luego a lo mejor tarda más en recuperarse. Es irreversible que siga aumentando el paro.

- ¿No se ha tocado fondo aún?

- No, las empresas están apuradas, los créditos parece que no les llegan con la fluidez que ellas quieren para poder sobrevivir. Yo no veo que pueda haber un cambio, la tendencia sigue siendo descendente. Pero yo creo que durante este año entero la tendencia es que aumentará el paro.

-- ¿Qué balance hace de esta legislatura?

- Tengo que valorarla muy positivamante porque en estos años hemos hecho 47 dictámenes de anteproyectos de ley, que fueron fundamentales para Galicia: ley de vivienda, ordenación del territorio, ley de minas, ley de turismo…

-- ¿Fue esta una legislatura más prolífica en leyes que la anterior?

- Por el estilo. Quizás estos últimos dos años hayan superado algo a periodos anteriores pero no hay grandes diferencias.

-- ¿Hizo caso la Xunta a todos sus dictámenes?

- Es difícil que si un dictamen contiene una crítica específica a un tema fundamental se haga caso a todo el dictamen ya que el Gobierno plasma en sus leyes su proyecto político y hacer caso a las críticas sería cambiar su proyecto, pero hay cosas parciales en las que sí han hecho caso a recomendaciones. A todos nos gustaría que fuera mucho más, pero tampoco estamos aquí para cambiar el proyecto político de un gobierno, sino para que el gobierno tenga conocimiento de lo que piensa la sociedad civil. Lo que sí me gustaría decir es que tanto con el Gobierno de Manuel Fraga como con éste, aquí no hemos recibido ningún tipo de presión, ni siquiera amago o insinuación de ningún conselleiro para que un informe pudiera ir en un sentido u otro.

-- ¿Cómo han sido las relaciones con el bipartito?

- Perfectas, porque han sido todas institucionales, no de otro tipo. Yo he trabajado con total libertad y autonomía.

-- ¿Pero habrá algo que se pueda mejorar?

- Lo veo difícil. A lo mejor el Gobierno podría haber pedido más cosas, más que los dictámenes, pues sí. Podría haber pedido algún informe. Pero las relaciones son buenas y hay fluidez.

-- ¿Dónde cree que se ha equivocado el bipartito?

- Mi misión aquí no es criticar, perdería posiblemente la independencia y la objetividad que tengo.

-- ¿Cree que el nuevo Gobierno del PP debería revisar alguna de las leyes aprobadas en la pasada legislatura?

- Es cierto que los dictámenes que emitimos han tenido distintas repercusiones y a algunos conselleiros les pareció mal. Pero aquí no se hace nada con intención de criticar a ningún conselleiro o a una conselleira por ser de un partido o de otro o porque se le tenga manía. En ese sentido, no tenemos ninguna intención de comentar si se deben revisar.

-- ¿El nuevo Gobierno lo tendrá difícil para remontar la crisis?

- Es un hecho. Coge la situación en un momento complicado económico y financieramente.

-- ¿Y cúal es su futuro?

- Estoy en funciones desde el 22 de junio del año pasado. Yo no tengo la menor noticia de nada como es natural. Estoy a la espera de lo que ocurra, y no me voy a autopromocionar. Todo el mundo me conoce, llevo muchos años en la vida política. Llevo cinco años en este cargo y a disposición. Pero insisto en que yo no quiero influir en absoluto en la decisión que quiera tomar el nuevo Gobierno.

-- ¿Pero está dispuesto a continuar como presidente del CES?

- Si, por supuesto, yo me encuentro bien física y mentalmente y creo que, dentro de un cierto orden, hemos funcionado estos años con normalidady el ambiente es bueno entre todos los que conformamos esta gran familia. Pero para autopromociones llegan las de los supermercados, aquí ya nos conocemos todos. Yo digo que sí, que estoy dipuesto. No voy a decir que no me voy, o que no puedo más. Pero ahí me callo y aceptaré la decisión del nuevo Gobierno.