Los movimientos dentro del Bloque para hacerse con la vacante del liderazgo dejada por Anxo Quintana tras los malos resultados del 1 de marzo han dado los primeros pasos. Carlos Aymerich ha comenzado a ofrecerse como candidato a la portavocía nacional en una ronda de contactos con los diversos partidos que conforman el BNG.
Antes de comunicar oficialmente sus aspiraciones, el también portavoz parlamentario quiere conocer las opiniones de los militantes y de las corrientes del Bloque. Por eso, desde hace diez días está tanteando con los distintos partidos las posibilidades reales que tiene de hacerse con el liderazgo de la formación nacionalista.
Al menos, estos contactos ya los ha mantenido con la UPG, Esquerda Nacionalista y Espazo Socialista Galego, en los que Carlos Aymerich está presentando su proyecto político y ofreciendo su disponibilidad a encabezar una candidatura. Varias son las personas que le acompañan en la ronda de conversaciones para reforzar su perfil como portavoz nacional y entre ellas figura la conselleira de funciones de Vivenda y también diputada, Teresa Táboas, según confirmaron varias fuentes del Bloque.
Como principales apoyos, Aymerich cuenta con el sector quintanista y está bien considerado por la UPG, el partido hegemónico en el BNG con tendencia a controlar cada movimiento en la formación.
Profesor de Derecho Administrativo de la Universidad de A Coruña, fue parlamentario en el Congreso entre 2000 y 2004. Durante esta etapa trabajó mano con mano con el entonces portavoz nacionalista en la Cámara Baja y líder de la Unión do Povo Galego, Francisco Rodríguez.
De regreso a Galicia entró en la Cámara autonómica, donde en la pasada legislatura además de ejercer como portavoz parlamentario realizó labores para consolidar a Anxo Quintana en el Bloque con una estructura orgánica propia.
En esta legislatura, el BNG volvió a designar a Aymerich como portavoz parlamentario, lo que muestra el nivel de confianza de la formación en este político coruñés.
Pero que esté bien considerado por la UPG no quiere decir que esta formación lo apoye de primeras como candidato a la portavocía nacional. De hecho se está planteando presentar como aspirante al concejal del Ayuntamiento de Pontevedra Guillerme Vázquez.
Diversas fuentes del BNG sostienen, no obstante, que la propuesta de Vázquez sería una estrategia para obligar a Carlos Aymerich a negociar con la UPG una lista a la ejecutiva y garantizarse así la mayor representación posible.
Y por otra parte estaría el papel que le corresponde a Encontro Irmandiño -el sector más crítico con la dirección saliente del BNG-, que de momento advierte con presentar como candidato a Xosé Manuel Beiras, aunque sería un liderazgo provisional hasta la celebración de una asamblea ordinaria dentro de un año y medio, momento en el que tratarían de lanzar como líder del BNG al alcalde de Teo, Martiño Noriega.
Como cabeza de cartel a las elecciones europeas de junio, dos son los nombres sobre la mesa. La abogada Ana Miranda y el economista Xavier Vence, este último impulsado por la UPG.
Respaldo casi unánime a la alianza con ERC para las europeas
El consello nacional del BNG ratificó ayer, con un 95,5% de los votos, la propuesta de la ejecutiva para concurrir a la elecciones europeas con ERC, Aralar y Eusko Alkartasuna (EA), una decisión con la que es “plenamente respetuosa” CiU, en palabras del coordinador ejecutivo de la formación frentista, Francisco Jorquera. La decisión adoptada obtuvo sólo un 2,8% de abstenciones y un 1,4% de los sufragios en contra. Las votaciones reflejan que la oposición a dejar la alianza con el PNV y CIU, con los que concurrieron los últimos comicios europeos, fue mínima.
En la rueda de prensa posterior al consello nacional, el coordinador ejecutivo y representante del Bloque en Galeuscat afirmó que la decisión de participar en los comicios del 7 de junio con una alianza alternativa “ya fue expresada” a la plataforma con PNV y CiU, y justificó que ésa fue “diseñada para la política estatal y no bajo unas siglas electorales”.
En su intervención, Jorquera expuso que para el consello nacional es “básico más que nunca” que en Europa “haya una voz gallega que incida en una perspectiva” de esta índole. Así, evocó la “crisis de un modelo que la UE sacralizó y convirtió en dogma” para recalcar las “carencias importantes” que ahora se derivan para Galicia.
En esta coalición, el puesto número dos queda reservado para el Bloque.
