El Parlamento gallego ha arrancado su octava legislatura con una llamada al “consenso” por parte de la nueva presidenta de la Cámara, la popular Pilar Rojo, y un clima de cordialidad por parte de los tres grupos parlamentarios que optaron por una política de guante blanco para su estreno en el hemiciclo. Tras cuatro años en el bipartito, PSOE y BNG estarán de nuevo en la oposición y el PP vuelve a ostentar la mayoría absoluta (38 diputados), lo que les ha permitido colocar al frente de la Mesa del Parlamento a la ex conselleira Pilar Rojo, que fue elegida para este puesto con los votos a favor del Partido Popular y la abstención de socialistas y nacionalistas.

Los tres grupos estarán representados en el órgano de dirección de la Cámara, después de que el PSOE cediera al BNG la Vicesecretaría de la Mesa. Este puesto será ocupado por el hasta ahora número dos de la Xunta y líder del Bloque, Anxo Quintana. Lo acompañarán el socialista Ricardo Varela, como vicepresidente segundo, y los populares José Manuel _Baltar, que será vicepresidente primero, y José Manuel Balseiro, que desempeñará la tarea de secretario.

Elegida la Mesa de la Cámara todos sus miembros “juraron o prometieron guardar fidelidad a la Constitución y al Parlamento de Galicia”. La presidenta, Pilar Rojo, pidió a los diputados que hoy tomaron posesión de su escaño que lleven a cabo “un trabajo riguroso y constructivo en la Cámara”. Pero sobre todo puso énfasis en la necesidad de los tres grupos de llegar a acuerdos en esta legislatura para atajar la crisis económica. “Es cierto que en una democracia de partidos, nos separan cosas, pero nos une a todos algo más importante que es la pasión y las ganas de trabajar por Galicia”, proclamó. “A este consenso, apelo hoy, más aún si cabe, por los momentos de especial dificultad económica que nos toca vivir”, añadió.

Rojo se convirtió ayer en la segunda mujer en presidir la Cámara autonómica, relevando en el puesto a la socialista Dolores Villarino. “Yo espero que mi nombramiento sirva para que el acceso de las mujeres a los diferentes puestos de responsabilidad se asuma con naturalidad y el hecho del género deje de ser noticia”, expuso.

La nueva presidenta del Parlamento agradeció particularmente a Alberto Núñez Feijóo el “apoyo incondicional” que le prestó para que pudiera ejercer “tan alta responsabilidad”.

Constituida la Mesa del Parlamento la primera decisión que le corresponderá tomar será la de fijar la fecha para la sesión de investidura del futuro presidente de la Xunta -aunque el calendario no está cerrado el día 15 de este mes es una de las opciones que cobra más fuerza-.

La apertura de la legislatura supone además el pistoletazo de salida al traspaso de poderes. En la sesión constitutiya de ayer aún ocupaban sus puestos en la primera fila del hemiciclo los conselleiros del bipartito, cuatro de ellos -José Ramón Fernández Antonio, Laura Sánchez Piñón, María José Rubio y Ánxela Bugallo,- no volverán al Pazo do Hórreo ya que no tienen acta de diputados.