El macroconcurso eólico impulsado por la Consellería de Innovación pasará a la historia no sólo por la elevadísima potencia a repartir -al fin y al cabo, desde el estallido del aprovechamiento del viento en Galicia se han instalado en la comunidad 3.000 MW, sólo 700 más de los que se adjudican ahora-, sino también por las caras nuevas que entran a jugar en el sector y que hasta ahora no han tenido nada que ver con él. Especialmente llamativo es el caso de Auxiliar Conservera (Aucosa), que se ha colado como la segunda petición que más cuota recibe, hasta 216 MW. Un grupo formado por las conserveras Alfageme, Thenaisie, Pita Hermanos y Albo, con el 50% del capital de la sociedad concursante. La otra mitad, correspondiente a la firma viguesa Terawatio, que ya cuenta con intereses en el mercado energético.

Son el mejor ejemplo de la oportunidad que brinda la licitación de dar entrada a compañías con un negocio muy alejado de la electricidad y que ahora podrán diversificar sus ingresos. Aucosa Eólica pretende ponen en marcha proyectos de I+D asociados a su actividad, las conservas. Ventos Cooperativos, también a la suya, el sector lácteo. Feiraco, Os Irmandiños, Colaga e Icos -con más de 10.000 explotaciones lácteas- se estrenan con la gestión del viento, en compañía de Croquis Enerxía y Eolica. Juntas levantarán cuatro parques con 48 MW cada uno -muy cerca de los 357 MW que habían solicitado- y se han comprometido a poner en marcha el tan demandado grupo lácteo gallego. "Es la primera vez que los propietarios del suelo y de las explotaciones lácteas ven reconocidos sus derechos a participar en el desarrollo de la comunidad", aseguraban ayer, tras reafimar su compromiso con el futuro lácteo, las mejoras medioambientales y energéticas en sus instalaciones y la creación del Instituto de Desenvolvemento do Campo. "Estamos convecidos -añaden- de que es el mejor mecanismo para que se produzca una efectiva redistribución de la riqueza en nuestro país".

Gupo Puentes y Cupa

Otro caso. Otro ejemplo más de la aspiración de las firmas del ladrillo -como ocurre también con San José- para huir hacia actividades más rentables actualmente. Y más seguras. La alianza del Grupo Puentes, la constructora con sede en Oroso, y Engasa. Hasta 173,4 MW para cuatro parques.

Poco, o nada, se ha hablado de Cupa Renovables, filial de Cupa Group (la antigua Cupire Padesa), que lidera el mercado de la pizarra desde su sede en Ourense y que ahora pretende acercarse al negocio eléctrico. No dicen ni palabra del plan industrial que tienen entre manos y que, junto con el proyecto para tres parques.

julio pérez  Vigo