Paula Pérez  Santiago

Como una estrella de rock. Emilio Pérez Touriño fue aclamado ayer por más de 5.000 personas al ritmo de "Alright" de la banda británica Supergrass. Sobre su cabeza varios haces de luz proyectaban su nombre y desde las esquinas del recinto cuatro cañones lanzaban hasta cien kilos de confeti. Fue el protagonista absoluto, ningún telonero puso el prólogo a su discurso como es habitual en otros mítines. Sólo dos voces en off conducían el acto que el propio líder socialista definió como "una explosión de júbilo".

Lo que menos se escuchó durante el mitin fue la sintonía de los socialistas. La canción "Hoy puede ser un gran día" interpretada por Joaquin Sabina y Joan Manuel Serrat fue el arranque de un repertorio que hizo levantar de la silla a más de uno para bailar.

Con el Palacio de Congresos abarrotado dos voces en off fueron llamando a los cargos políticos y dirigentes del PSOE que entraron escalonadamente. "Encabezados por la secretaria de Organización, Mar Barcón, un fuerte aplauso para la ejecutiva nacional", se escuchó, al tiempo que, entre ovaciones, hicieron su aparición los miembros de la dirección del partido. A continuación pincharon a The Cranberries para recibir a los parlamentarios del PSOE, presididos por Dolores Villarino. Luego entraron los alcaldes, los presidentes de las diputaciones de Lugo y A Coruña y el presidente de la Fegamp. Les siguieron los conselleiros, los ministros de Cultura y Medio Ambiente y la portavoz socialista en el Senado, Carmela Silva.

Todos desfilaron por el pasillo entre aplausos y bajo el ritmo de éxitos de Oasis, Dover o Duffy. Ya con el público en pie hizo finalmente su aparición Touriño, junto a su esposa, Ester Cid, y secundado por los presidentes de Asturias, Extremadura, Andalucía y del vicesecretario general José Blanco.

En el escenario varias pantallas electrónicas lo recibían como el "mejor presidente". Antes de lanzarse al ruedo un vídeo sirvió para ensalzar la personalidad política y el carácter de Touriño. "No es lo que dice, ni lo que transmite, lo importante es lo que es: talante, trabajo, compromiso..."

Las primeras palabras del candidato socialista a la Xunta fueron de agradecimiento. Citó a Mar Barcón, a José Blanco y al vicesecretario xeral del PSdeG, Ricardo Varela, pero también a su familia. "Gracias a mi mujer y a mis hijos que me acompaña en la vida y me soportan. Ellos son las únicas personas a las que les puedo pedir que me apoyen sin necesidad de que me pidan explicaciones", comentó.

Una intérprete para sordos traducía sobre el escenario las palabras de Touriño. Entre los asistentes se encontraba la Federación de Xordos y miembros de la ONCE, además de los secretarios xerais de UGT, CCOO y Unións Agrarias.

Las nevadas que se registraron ayer, sin embargo, impidieron que la afluencia fuese mayor. Ocho autobuses de Lugo y siete de Ourense se quedaron en el camino debido a las dificultades para circular por la carretera.