Los alumnos con algún tipo de discapacidad serán escolarizados de forma preferente en colegios que la Xunta catalogará como "de referencia" por estar dotados de equipamiento, recursos y servicios complementarios que permitan dar una atención más específica a estos niños. En cada comarca se designará un centro de cabecera y habrá además otro en cada ciudad. Así lo recoge el borrador que prepara la Consellería de Educación para la atención a la diversidad del alumnado y que ha suscitado ya el rechazo del sindicato mayoritario, CIG.

La idea que defiende la Xunta es la de "racionalizar recursos". Por esta razón, si en una zona geográfica hay, por ejemplo, cinco niños que sufren algún tipo de minusvalía y requieren de atención específica, en lugar de escolarizarlos en cinco centros distintos, se intentará agruparlos en un único colegio.

Siempre que su grado de discapacidad no requiera de una mayor atención, podrán permanecer escolarizados junto a los demás niños del aula y únicamente recibirán clases de apoyo para compensar sus deficits.

Los colegios de escolarización preferente para minusválidos, tanto físicos como mentales, no son, sin embargo, el único modelo para atender a niños con minusvalías que propone Educación en su su borrador de decreto.

Dependiendo del tipo de discapacidad podrán tomarse medidas más estrictas y agrupar a estos niños en aulas específicas, separados del resto de sus compañeros. Por último, cuando ya se trate de un tipo de minusvalía severa estos alumnos serán internados en los centros de educación especial que ya están funcionando ahora en la comunidad autónoma. Una de las novedades que introduce el nuevo decreto que prepara Educación es que se amplía hasta los 21 años la edad en la que estos niños podrán permanecer escolarizados en los colegios especiales.

La oferta de centros y aulas para escolarizar niños discapacitados está aún por determinar. Educación advierte, en su borrador de decreto, que donde haya una escuela de educación especial ésta ya hará las funciones de colegio de referencia para toda la zona.

La CIG considera que escolarizar a los niños discapacitados agrupándolos en un centro o un aula debe ser sólo una medida "excepcional". "La consellería debe dotar a todos los centros con los recursos necesarios para poder integrar al alumnado en el centro que le corresponda", defienden.

Los problemas pueden aparecer cuando Educación ordene escolarizar a un niño en un colegio que quede muy alejado del domicilio familiar y con dificultades para su desplazamiento. A comienzos de este curso ya hubo, de hecho, quejas de algunos padres de niños con discapacidad por las decisiones de Educación de cambiar a su hijo de centro.

En el nuevo borrador de atención a la diversidad se marcan además cuáles deben ser las prioridades en la educación de estos niños. Su formación estará enfocada a que adquieran habilidades en el autocuidado personal, de seguridad y de su salud, así como fomentar su sociabilidad, al tiempo que adquieran las competencias educativas básicas.

La normativa incluye también la atención a niños inmigrantes. Estosirán al colegio junto con los demás alumnos, a excepción de los que tengan problemas graves con el idioma que serán integrados en aulas específicas para aprender el español. En cuanto a los estudiantes superdotados el nuevo decreto contempla la posibilidad de flexibilizar su escolarización para que puedan avanzar de curso, aunque no tengan la edad correspondiente para superar la etapa.