La Consellería de Vivenda ha recortado en un 27 por ciento el presupuesto destinado al Programa de Vivenda en Aluguer al no cumplirse las expectativas de gasto previstas para este año. El objetivo que se había marcado la Xunta era alcanzar los 4.500 contratos subvencionados, pero dos años después de su implantación se ha quedado en algo más de 3.000. Para atraer a más beneficiarios el departamento que dirige Teresa Táboas decidió a mediados de este año reformar el plan y duplicar las ayudas que concede a los propietarios de pisos para que los incluyan en la bolsa de alquiler. Entretanto, la renta básica de emancipación que concede el Ministerio de Vivienda ha recibido en sólo un año más de 17.000 solicitudes y ya hay 9.600 ayudas aprobadas.

La diferencia es que las subvenciones de 210 euros que ofrece el Gobierno central son válidas para cualquier contrato de arrendamiento, siempre que el inquilino sea menor de 30 años. En el caso de la Xunta las ayudas se limitan a aquellos pisos que están incluidos dentro del Programa de Aluguer. Para persuadir a más propietarios y aumentar la oferta de inmuebles la consellería elevó hasta los 12.000 euros la subvención que les otorga para arreglar las viviendas.

Según el departamento que dirige Teresa Táboas, a raiz de esta medida se produjo un incremento en el número de propietarios interesados en pasar a formar parte del programa y rehabilitar sus pisos. Sin embargo, al disponer de una mayor subvención las reformas son más importantes y, por lo tanto, hasta que se terminen las obras no podrán formalizarse más contratos de alquiler.

El resultado es que este año concluirá sin que se alcance el objetivo de los 4.500 alquileres subvencionados. Es más, aunque se han contabilizado en total más de 3.400 contratos firmados desde que arrancó el programa -en febrero de 2006-, ahora quedan vigentes 3.080 ya que el resto no han sido renovados.

Las expectativas eran mayores y la Consellería de Vivenda había dispuesto una cantidad inicial de 6,3 millones de euros para financiar el Programa de Aluguer, que incluía tanto subvenciones para los arrendatarios como ayudas para que el propietario arregle el piso. Sin embargo, a punto de finalizar de año, aún no se ha gastado buena parte de esta partida ni hay previsión de hacerlo, de manera que la Xunta ha decidido recortar los fondos destinados al alquiler. "Resulta un remanente que se necesita utilizar para otros fines. Por lo tanto procede minorar los créditos", se explica en la orden publicada ayer en el Diario Oficial de Galicia. Sólo para rehabilitación la cuantía se reduce a la mitad. Baja de 1,8 millones de euros a 940.000.

El departamento de Teresa Táboas explica que para el próximo año cuando se finalicen las obras de rehabilitación pendientes se podrán suscribir más contratos. Sin embargo, la partida prevista para 2009, un total 4,8 millones de euros, se mantiene igual con respecto a la primera previsión de Vivenda. "Siempre podemos realizar una ampliación de crédito", aseguran desde la consellería.