Galicia, Asturias, Castilla-León y Aragón son las comunidades autónomas que menos han aumentado sus emisiones de gases de efecto invernadero respecto a 1990, según se desprende del último informe, por regiones, de emisiones elaborado por CC.OO, correspondiente a datos de 2007.

El trabajo, presentado hoy por el coordinador de la Secretaria Confederal de Medio Ambiente del sindicato, Fernando Rodrigo, y el director de la edición española de la revista 'World Watch', José Santamarta, señala a La Rioja, Murcia, Andalucía, Canarias, la Comunidad Valenciana, Baleares, Extremadura, Navarra y Madrid, como las regiones donde más han aumentado las emisiones de CO2.

Todas las comunidades autónomas crecen muy por encima del objetivo fijado por el Protocolo de Kyoto para España, que establecía un aumento de sus emisiones del 15 por ciento, mientras que el conjunto del país ya lo ha hecho en un 52,3 por ciento.

En cuanto a las emisiones de CO2 por habitante, destaca Asturias, que es la que más emite con 30,95 toneladas; mientras que Madrid es la que menos con 4,66 toneladas. Además, respecto a las emisiones difusas (transporte, residencia, servicios) las regiones con un porcentaje por encima de su población son: Aragón, Asturias, Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia, País Vasco y La Rioja.

Por otro lado, el estudio destaca que sólo 120 instalaciones emitieron en 2007 el 36 por ciento de los gases de efecto invernadero de España. De ellas, las centrales termoeléctricas de carbón fueron responsables del 15,7 por ciento de las emisiones de gases de España de 2007. "Las comunidades autónomas que más emisiones generan por habitante son las que tienen centrales térmicas, especialmente de carbón, pero precisamente son estas comunidades en las que menos crecimiento se ha producido", explicó Rodrigo.

Los responsables del estudio creen que hay motivos para "sacar los colores" a los gobiernos autonómicos, y que sin su implicación será imposible el cumplimiento del Protocolo de Kyoto por parte de España.