El reforzado "número 2" del PSOE_vino al Club FARO_a hablar de "la segunda etapa del cambio", un lema que tal vez recuerde al "cambio del cambio" del que se hablaba durante el mandato de Felipe González. Para José Blanco, no hay tal: "Estamos entrando en la segunda fase, dando nuevas respuestas a los problemas -explica-, pero manteniendo la línea de más derechos y más política social, que es lo que ha caracterizado la primera fase del cambio del presidente Zapatero".

-Sí parece que ha cambiado la política de inmigración y la del agua: ahora se plantea algún que otro trasvase...

-No. No hemos cambiado la política del agua ni la vamos a cambiar. En la primera legislatura avanzamos en el reconocimiento de derechos, extendimos políticas sociales y seguimos impulsando la modernización de nuestro país con una prioridad: cambiar nuestro modelo productivo. Si lo hubiéramos hecho antes, la crisis no mostraría tanta dureza en España y tendría menos consecuencias sobre el desempleo. En la legislatura pasada aprobamos la Ley de Dependencia, y en ésta hay que convertir esa ley en derecho para todas las personas dependientes.

-Ha estrenado cargo como vicesecretario general del PSOE, un cargo que hasta ahora sólo había ostentado Alfonso Guerra. ¿Se siente continuador del estilo político de Alfonso Guerra?

-Cada uno tenemos un estilo. Estamos en un momento político diferente y por tanto el trabajo también tiene que ser diferente. Yo me quiero parecer a Pepe Blanco.

-Usted ha mostrado un decidido apoyo y hasta admiración por Barack Obama. ¿Seguirá in situ las elecciones en Estados Unidos el próximo martes?

-Sí. Estaré en Washington el próximo martes. He tejido una red de complicidad del Partido Socialista con el Partido Demócrata. Tengo muy buenas relaciones con muchos políticos demócratas: con Howard Dean, su presidente; con Bill Richardson, el gobernador de Nuevo México... Me han invitado a vivir de cerca las elecciones. Es muy importante para el mundo una victoria demócrata: para una economía más democratizada, con más controles y más transparencia; para volver a impulsar una política exterior basada en el multilateralismo... Espero ver en Washington el cambio que sería bueno no sólo para EE UU sino para todo el mundo.

-En el programa electoral de Obama figura un amplio recorte de impuestos a las familias y a las pequeñas y medianas empresas, una medida que en España les ha reclamado el PP. No sé si en esto coincide también con Obama...

-Mire, el Partido Popular reclama una cosa y donde gobierna hace la contraria. Acabamos de ver cómo el Ayuntamiento de Madrid viene de aumentar los impuestos y de crear una nueva tasa sobre la basura, además de incrementar, en momentos de crisis, el salario de los concejales y del alcalde un 11 por ciento. Tuvo que llegar el gobierno de Zapatero para bajar por primera vez el impuesto de sociedades. Acabamos de anunciar la supresión del impuesto de patrimonio. En la legislatura pasada rebajamos el IRPF y ahora hemos introducido una nueva rebaja con los 400 euros para las familias de este país. Nuestra política impositiva favorece a las personas con menos recursos. Las rebajas de impuestos de la derecha han beneficiado a los que tienen más, por ejemplo en el terreno de las plusvalías.

-En lo que sí han obtenido el respaldo del PP ha sido en las medidas para recuperar la liquidez bancaria. ¿Es ahora más fácil a un ciudadano medio obtener un crédito en un banco que hace un par de meses?

-El Partido Popular lo apoyó a regañadientes. Estuvieron cicateros. No les quedaba más remedio, porque todos los sectores económicos entendieron que eran medidas positivas. Cuando lo propuso Zapatero era malo. Una vez que lo propusieron Merkel y Sarkozy se convirtió en bueno y llevó al PP a votarlo en el Parlamento. En nuestro país hay un problema de liquidez, los créditos no llegan a las empresas ni a las familias. Las medidas del Gobierno permiten que nuestras empresas puedan seguir creciendo y generando empleo, facilitando a empresas y a familias que puedan acceder a los créditos.

-El consejero delegado del Santander, Alfredo Sáenz, ha pedido que estas ayudas estatales no se hagan públicas, justo cuando la entidad cántabra acaba de anunciar beneficios récord en la banca mundial...

-Las medidas tienen que tener la máxima transparencia. Hay que compatibilizar los intereses de las entidades financieras con el objetivo de máxima transparencia para conseguir lo que se persigue, que haya más liquidez y suplir el déficit de crédito que hay en nuestro país. Nuestras entidades financieras han resistido bien porque han estado sujetas a un control estricto por parte del Banco de España, lo que nos lleva a seguir reafirmando que nuestro sistema financiero es uno de los más sólidos del mundo.

--¿Qué opina del futuro de las cajas gallegas? ¿Es partidario de su fusión a medio o largo plazo?

-Soy respetuoso con su autonomía, y en todo caso debe ser el Gobierno de Galicia el que evalúe esta situación. En un mercado cada vez más competitivo, las entidades financieras tienen que tener fortaleza para poder competir. Tenemos dos buenas cajas, pero se debería al menos abrir una reflexión sobre si, desde el punto de vista de los intereses de Galicia, es más conveniente que pueda haber una confluencia o no. No tengo resuelto este debate, no estoy ni a favor ni en contra, pero creo que es positivo debatir. Galicia necesita el pulmón del sistema financiero para sus emprendedores.

--¿Asume el PSOE la postura del presidente de la Diputación de A Coruña, el socialista Salvador Fernández Moreda, que es también vicepresidente de Caixa Galicia, a favor de la fusión de las cajas gallegas?

-No opino sobre una reflexión aislada y probablemente interesada. La pregunta que debemos hacer es si las cajas gallegas cumplen su fin como elemento dinamizador de nuestra economía, si responden a la función social que le es propia, y si están en condiciones de competir en un mundo cada vez más globalizado.

-España sufre unos índices de inflación y de desempleo por encima de la media de los países del euro. ¿Cómo debe afrontarse este escenario de "estanflación", de estancamiento de la economía y de alta inflación?

-Es verdad que algunos aspectos de la economía española son peores que los de algunos países de la UE. El factor del desempleo no es nuevo. Tal vez tenga que ver con la incorporación tardía de la mujer al mercado de trabajo. También es verdad que en nuestro país nunca ha habido tanta población activa, más de 20 millones de personas, cuando en 2004 eran 17.5 millones. Pero existen factores positivos: España es uno de los países de la UE con menor nivel de deuda. Eso nos permite mantener el gasto social y hacer una apuesta por la productividad y por las infraestructuras que no sería posible sin una economía tan saneada. Los desempleados deben saber que si gobernara el PP tendrían dos problemas: la amenaza de la crisis y la de los recortes.

-El presidente de las Cámaras de Comercio, Javier Gómez Navarro, que fue ministro de Comercio con el PSOE, ha dicho que los sindicatos "deben dejar de proteger a los vagos". ¿Qué opina de estas declaraciones?

-Se lo he dicho personalmente: son un poco exageradas. Los sindicatos contribuyen de forma positiva al bienestar de los españoles y han tenido una actitud de gran responsabilidad en estos años de democracia. Junto con los empresarios, han trabajado desde la concertación social de forma muy intensa y eso ha dado muy buenos frutos, como la conquista de derechos y el avance de nuestra economía. Y ahora están contribuyendo a la salida de la crisis.

-Hablemos de Galicia. El hecho de que Touriño no adelantase las elecciones gallegas se interpretó como un golpe de autoridad del presidente de la Xunta ante las presiones de Ferraz. ¿Sigue pensando que era mejor adelantar los comicios?

-Yo nunca he manifestado que estuviera por adelantar los comicios. Se me ha pedido mi opinión y he hecho una reflexión. Había que decidir si estábamos dos meses de campaña electoral o si estábamos ocho. Lo estamos viendo estos días: estamos en plena campaña electoral. Se ha optado por el segundo modelo, y la decisión la ha tomado quien podía tomarla, que era el presidente de la Xunta, pero nadie ha tratado de condicionar su decisión. Desde el punto de vista del PSOE es indiferente, porque todos los indicadores ponen de manifiesto que el PP baja y el PSOE sube en Galicia.

-Usted afirmó que no creía que se confirmase el cisma entre el PP y UPN, y que donde dijeron "digo" dirían "Diego". ¿Está contento de haberse equivocado y de que la ruptura se haya verificado?

-Vamos a ver si se verifica.

-No está usted muy seguro...

-Hay que esperar. En todo caso, me parece que el PP no entiende Navarra; y que la responsabilidad del PSOE facilitó que UPN esté ahora en el gobierno. No pedimos nada a cambio, fue una apuesta por la convivencia y por la estabilidad. Hablamos de lo que deberían contener los Presupuestos del Estado en relación con Navarra, y una vez que hemos dado satisfacción a esas demandas les hemos pedido coherencia. Al PP le interesa poco Navarra, lo único que le importa son los intereses del partido, y por eso han tomado esta decisión de la que yo creo que se arrepentirán algún día.

-¿Es cierto que barajó abandonar la política antes del último congreso del PSOE?

-Pues sí. Después de estar mucho tiempo en primera línea, hay vida más allá de la política. En todo caso, no pasó de una reflexión, porque el presidente del Gobierno manifestó que era imprescindible -yo creo que imprescindible no hay nadie- para su proyecto político. Y aquí estoy.

-¿Su próximo destino podría ser una cartera ministerial?

-En política, igual que en el fútbol, hay un entrenador que reparte juego. Y uno está a disposición de lo que diga el entrenador.

-Tal vez nos vendría bien a los gallegos que ocupase la cartera de Fomento para que se acelerase la llegada del AVE a Vigo...

-Se está acelerando desde que gobernamos. Por cada euro que invertía el PP cuando gobernaba -y eso que Rajoy, que era el vicepresidente, es de la provincia de Pontevedra- ahora se invierten dos euros y medio. Galicia es la tercera comunidad en la que más se está invirtiendo en alta velocidad. Galicia necesita que el AVE llegue en 2012 y el Gobierno de España está comprometido en ello. Si es necesario se harán más esfuerzos. Desde luego, con enmiendas como la presentada por el_PP para recortar inversiones del AVE a Galicia, ese calendario no se lograría nunca.

-Acaba de comparar la política con el fútbol. Los grandes futbolistas desean terminar su carrera deportiva en el club de su tierra. Tal vez el final de su carrera política podría estar en Galicia...

-Mire, el club de mis amores es el Celta de Vigo y yo no me veo como candidato a la Alcaldía de Vigo, donde está mi buen amigo Abel Caballero.

-Me refería a la Xunta...

-En política no se puede pensar a tan largo plazo. Hay unas elecciones y tenemos un magnífico candidato, Emilio Pérez Touriño, que ha demostrado ser un presidente confiable para los gallegos. Como dicen aquí en mi tierra, "largo me lo fiáis".

-Si pensó dejar la política este año y en 2000, cuando conoció a Zapatero, ¿a qué tenía previsto dedicarse?

-Tengo varias perspectivas para realizar algún sueño, pero me va a permitir que, al no estar dentro de lo posible en los próximos tiempos, no señale ningún camino por el que pueda transitar.

-¿Tiene enemigos en del PSOE?

-Considero que no. He hecho el trabajo de la mejor forma que he sabido y honestamente creo que me he ganado el respeto de la inmensa mayoría de mis compañeros.

-Habrá quien diga que no tiene adversarios porque ya los ha eliminado a todos...

-No tengo esa conciencia, al revés: me caracterizo por tratar de comprometer al mayor número de personas en el proyecto político. Si usted fuera por mi tierra, Lugo, verá que todos los que fueron mis adversarios políticos, cuando jugaba en el terreno local y provincial, han tenido la llamada y la atención de José Blanco.

-Se ha declarado seguidor del Atlético de Madrid?

-No, no, no. Yo soy seguidor del Celta de Vigo y mi segunda simpatía es el Atlético de Madrid. Que quede claro.

-Se ha publicado que Aznar pensó presentarse a presidente del Real Madrid. Si lograse ese objetivo tal vez sí diría usted que le da "asco" el Madrid...

-No, no. Jamás he dicho que me diera asco el Atlético de Madrid pese a que su presidente era Jesús Gil. Y no quiero comparar al ex presidente Aznar con Gil. Si tiene la vocación de ser presidente del Madrid y los socios le votan no hay nada más que añadir.

-Rajoy sufrió un grave accidente de coche en 1979 en Palas de Rei, donde usted nació. Usted contaba entonces 17 años y estaba entrando en la política. ¿Puede asegurar que no estaba en el lugar de los hehos el día de autos?

-Le aseguro que no. Desconocía este hecho hasta hace muy poco. En todo caso, nunca me alegro del mal ajeno. En el ámbito personal le deseo mucho éxito a Rajoy. En la política quiero que siga acertando como hasta ahora (sonríe).

-Usted fue un niño de aldea que hablaba gallego y por ello sufrió alguna burla en el colegio. ¿Qué le dicen sus antiguos compañeros de clase cuando ven lo alto que ha llegado?

-Casi todos me miran con mucho respeto y admiración. Mantengo lazos con ellos. Precisamente tendré una comida con la gente del colegio en los próximos días. Siempre he tratado de cuidar a mis amigos, de mantener la misma disposición hacia ellos. En este aspecto he cambiado bastante poco.

-Zapatero come almendras. Rajoy, cuatro piezas de fruta al día. ¿Tiene usted algún secreto alimenticio?

-No. El único secreto es que, contrariamente a lo que ocurre con los dos, me gusta cocinar más que comer. Como de todo y disfruto de la comida gallega. Siempre que voy a Madrid me llevo productos de aquí, desde las patatas hasta los huevos, no digamos el pan gallego.

-A Zapatero le apodaban "Bambi". No sé si a usted le cayó algún otro mote de la Disney, como Cruella de Vil...

-Me llaman "Pepiño" como un desprecio hacia lo gallego. Es un invento de la clase periodística madrileña, que desconoce que este tipo de diminutivos se entiende fácilmente en Galicia.

-Le llamaban "O Bruxo"...

-Es otro invento madrileño que puso en circulación otro periodista, buen amigo mío en este caso, que publicó un artículo en el diario "ABC" que se titulaba "O bruxo de Palas de Rei", porque había acertado los resultados de las municipales de 2003, las primeras elecciones que coordiné como secretario de Organización.