Al socio de gobierno del PSdeG no le gusta la posibilidad de un adelanto electoral. El vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, rechazó ayer tajantemente un anticipo de los comicios en Galicia porque en una situación de crisis económica "lo que hace falta es estabilidad" y advirtió de que "especular" con las fechas "sólo levanta incertidumbre" en la sociedad y lo que toca ahora "es trabajar".

El Bloque "sólo contempla la posibilidad" de acabar la legislatura y "trabajar con más fuerza, si cabe, durante los próximos meses" para "enfrentar" la crisis económica. Quintana añadió que el "BNG tiene toda la planificación hecha" con vistas al término de la legislatura.

"Nos acogemos a la palabra dada por el presidente (de acabar la legislatura) porque compartimos la necesidad de acabarla con toda normalidad", aseveró el número dos del Gobierno gallego, a preguntas de los periodistas.

Patronal y sindicatos

Por su parte, el presidente de la patronal gallega, Antonio Fontenla, se manifestó ayer en relación a un posible adelanto electoral con una frase expeditiva: "No es mi problema", para añadir: "Pedimos a los políticos que no hagan de empresarios y nosotros no hacemos política".

Los representantes de UGT, CIG y CC OO concordaron en que ese adelanto "no es muy necesario". Esa fue la expresión del secretario xeral de CC OO-Galicia, Xan María Castro, quien explicó "que se ve una situación difícil, pero la va a tener este Gobierno y el que salga en el futuro". El secretario xeral de UGT, José Antonio Gómez, ve el adelanto sería negativo, ya que "generaría parálisis en la acción del Gobierno que es necesaria para paliar la crisis". Consuelo Martínez, de la CIG, no le parece algo "tan primordial".