Problemas de ansiedad, de estrés, hiperactividad... Cada vez más frecuentes entre los niños. De ahí también el aumento en la demanda que se viene registrando en las unidades de salud mental destinadas a menores que tiene el Sergas en la comunidad. Ocho, que en 2006 atendieron a 4.727 niños y jóvenes por primera vez, lo que representa un aumento de casi un 20% en comparación con el ejercicio anterior, según la última memoria del Servicio Galego de Saúde. Una situación que ha llevado a la Consellería de Sanidade a reservar un capítulo especial dentro del Plano Estratéxico de Saúde Mental de Galicia 2006-2011 a la atención a los más pequeños y a marcar como objetivos el refuerzo del servicio.

A los más de 4.500 menores atendidos en primera consulta hay que añadir otras 21.600 consultas de jóvenes que ya habían pasado por el psiquiatra antes. La mayor carga asistencial está en la unidad de salud mental de Vigo, con 1.806 consultas iniciales y otras 3.000 sucesivas. Le sigue Ourense, con 729 y casi 4.500, respectivamente. En Pontevedra, el número de menores que pasaron por primera vez por el servicio alcanzó los 536. Más de 700 suman las dos unidades que hay en A Coruña. Hasta 382 en Ferrol; 287 en Santiago; y 283, la de Lugo.

Estas unidades están especializadas en el tratamiento de menores de hasta 16 años. Los pacientes, según el Sergas, llegan mayoritariamente remitidos por la unidad de salud mental de mayores, por los servicios de Atención Primaria de los centros de salud y "eventualmente" por los de Educación y Servicios Sociales de los concellos.

El criterio para el reparto de las unidades, que prestan una atención ambulatoria, es que "al menos" exista una por cada una de las siete grandes áreas de Galicia. La prioridad pasa ahora por potenciar las que existen en Vigo, A Coruña y Santiago porque cuentan con un mayor volumen de población infantil y juvenil de la comunidad. De hecho, en la propuesta realizada para el Plano Estratéxico de Saúde Mental de Galicia, frente a las unidades existentes actualmente se aboga por tres más en las tres ciudades más pobladas de Galicia. Con la intención del Sergas de poner en marcha un nuevo programa sobre trastorno mental grave en la adolescencia, sería necesario "como mínimo", el incremento de un facultativo especialista más por cada unidad.

Los expertos apuestan también por elevar hasta los 18 años la edad de atención "con las adaptaciones de los recursos pertinentes". "Este incremento de recursos se estima que supondría un aumento de la actividad asistencial que compensaría la tendencia al incremento de la demanda en estas unidades constatada en los últimos años", apuntan.