"Incomprensible" para Greenpeace que la Xunta "no haya tenido en cuenta los impactos ambientales negativos" que tendrá el Plan Director de Náutica Deportiva. Un plan que prevé prácticamente triplicar el número actual de amarres -unos 14.000 entre los activos y los que están aprobados- y llegar hasta los 31.000. "Una sencilla comparación pone de manifiesto la exageración de las cifras del plan", apunta la organización ecologista. Galicia, según sus cálculos, tiene ya un porcentaje diez veces superior a las plazas de Italia -con diez veces más costa que la comunidad- de embarcaciones por amarre, y hasta seis veces por encima del dato de Francia, que es el país europeo con mayor número de embarcaciones de recreo. "La única buena noticia" para Greenpeace "es que no se destruirán nuevos tramos de costa para construir más puertos". Los concellos de costa que más riesgos corren en Galicia por estas actuaciones son Cedeira, Bueu, Cangas do Morrazo y Baiona, donde se podrían perder playas por las obras.