Socialistas y nacionalistas aprobaron ayer sin el respaldo de la oposición las conclusiones de la investigación sobre la supuesta agente electoral del PSOE, tras un debate en el que PSdeG y PPdeG se cruzaron peticiones de dimisión de altos cargos de ambos partidos. La oposición considera demostrado que Isabel Blanco buscó votos en Argentina para el candidato socialista a la alcaldía de Fisterra, Félix Porto, con cargo a un salario de Unións Agrarias subvencionado por la Xunta. Por ello, exige la asunción de responsabilidades. Y en respuesta, el PSdeG sostiene que no hay pruebas que justifiquen tal acusación y recuerda la polémica que envolvió al líder del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, por la entrega en un viaje a México de una subvención de la Diputación de Pontevedra a una entidad de la diáspora.

El BNG dio su voto a un dictamen que no exige dimisiones, pero su portavoz, Carlos Aymerich, confió ayer en que la Xunta "estará a la altura de las circunstancias" en este caso, en el que los nacionalistas defendieron en un principio la asunción de responsabilidades.

La condena a Paz

Fue en el transcurso de este debate cuando el PP aprovechó por primera vez en el pleno para sacar a colación que el TSXG acaba de condenar a la vicepresidenta primera del Parlamento, Tareixa Paz, por vejación injusta y coacciones al alcalde del Ayuntamiento ourensano de Barbadás, José Manuel Freire. La oposición pidió al titular de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, que repruebe su conducta, y el BNG, en una nota, respaldó a la parlamentaria.