Si usted vive en Vigo sepa que su vivienda emite 1,3 toneladas de dióxido de carbono al año. ¿Cómo evitarlo? Según los cálculos de los estudiantes de Biología, nuestra contribución al cambio climático podría reducirse a la mitad adquiriendo electrodomésticos eficientes y bombillas de bajo consumo, además de apagando ordenadores o televisores en lugar de dejarlos en reposo.

Los alumnos de la asignatura de Ecología, que se imparte en tercer curso, han desarrollado éste y otros proyectos para frenar la emisión de gases de efecto invernadero, que en Galicia han aumentado en un 32% durante los últimos dieciséis años.

Han manejado los datos reales de empresas como la tudense Montajes Rotelu, la refinería de Repsol en Pontevedra, un hotel-restaurante de A Estrada o una vivienda en Río Covo (Lugo), por lo que podrían ser puestos en práctica "de forma inmediata", asegura su profesor, Javier Montalvo.

Recuerda que la Xunta presentó recientemente un plan de acción contra el cambio climático al que destina 347 millones de euros para reducir doce millones de toneladas de emisiones al año. "Y los biólogos saben cómo prevenir y solucionar el problema", destaca el docente.

Montajes Rotelu libera 1,85 millones de toneladas anuales de CO2, pero si implantase un sistema de captación de energía solar mediante paneles fotovoltaicos podría reducir las emisiones a cero y la inversión se amortizaría antes de nueve años.

Además de ideas para aplicar en la industria, los estudiantes han diseñado propuestas de compensación como la creación de un humedal de cien hectáreas en Perú, dominado por el aguaje, que almacenaría casi tres mil toneladas de CO2 al cabo de doce meses y al mismo nivel durante 27 años.