El fiscal jefe del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), Carlos Varela, decretó hoy la apertura de diligencias informativas para conocer la situación de los miles de trabajadores portugueses que se desplazan a Galicia para trabajar, sobre todo en el sector de la construcción, y su incidencia en la seguridad vial mediante la redacción de un informe que se prevé que esté listo en dos meses.

Para la redacción de este informe, Varela solicitó al director territorial de Inspección de Traballo, Carlos Domenech, que se inspeccionen las condiciones laborales a las que se ven sometidos los operarios lusos, con la finalidad de conocer la incidencia que puedan tener las características de su trabajo en los accidentes de tráfico.

Además, pidió al jefe de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia, José Luis Ulla, que presente un informe sobre las circunstancias de los accidentes viales en los que resultaron fallecidos cuatro trabajadores portugueses el mes pasado en Lugo; así como uno sobre las características de los desplazamientos generales de estos trabajadores y su incidencia en la seguridad del tráfico en Galicia.

Finalmente, la policía judicial especializada se encargará de comprobar las condiciones laborales de una bolsa de trabajadores que podría rondar los 10.000 y de hacer inspecciones en aquellos centros de trabajo en los que pueda haber vulneraciones de sus derechos, como alertan algunos sindicatos.

Al respecto, el fiscal del TSXG apuntó que "no se trata de empresas concretas", porque se vigilarán "todas las que puedan estar bajo sospecha". Una vez realizadas las diligencias informativas, para lo que se prevé un plazo de dos meses, se conocerá "la situación real para actuar de inmediato en coordinación con el fiscal de sala de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, "de manera pionera en España".

En este sentido, avanzó que en materia de seguridad vial se tratará a los obreros portugueses "como a cualquier ciudadano español o de otra nacionalidad", de forma que se les impondrá "la misma sanción que si hubiera sido un español el que hubiera incurrido en el delito".

En este sentido, apuntó que, hasta el momento, la principal irregularidad en la que han incurrido obreros portugueses que se desplazan a Galicia a trabajar es en el exceso de velocidad con sanción administrativa, de forma que no se ha detectado por el momento ninguna infracción que requiriese llegar a la vía penal.

Factores de riesgo

Carlos Varela reconoció que "existen ciertos factores de riesgo" y el informe servirá para conocer "qué dimensión tienen y actuar". El objetivo es conocer si hay excesos de velocidad que pueden ser sancionados por el punto de vista administrativo o penal, si hay exceso de consumo de alcohol en los conductores, y si se produce conducción temeraria.

Además, también se analizará si desde el punto de vista laboral, los operarios portugueses que se desplazan a Galicia se ven sometidos a "jornadas prolongadas o a un abuso de situación de necesidad obligándoles a hacer desplazamientos largos para poder trabajar".

El delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras; y el conselleiro de Traballo, Ricardo Varela, se reunieron el pasado 29 de mayo y acordaron que esta semana diera comienzo una campaña de controles de tráfico por parte de la Guardia Civil para garantizar la seguridad viaria de los trabajadores portugueses que se desplazan a Galicia.

En la reunión, cuya celebración se fijó en el 'Encuentro Gallego-Luso sobre los derechos de los trabajadores portugueses desplazados a Galicia' que tuvo lugar en la localidad ourensana de Leiro el pasado 29 de abril, ambos acordaron la creación de un flujo de información regular con el objetivo de que los controles de los desplazamientos "sean más eficientes, adecuándolos tanto en los días de mayor intensidad de tráfico como en las zonas en las que se concentra mayor actividad laboral".

Situación actual

Casi 11.000 ciudadanos portugueses trabajan en Galicia de forma reglada, en torno a 7.800 en las grandes obras de infraestructuras, pero las autoridades laborales reconocen que existe una bolsa indeterminada de mano de obra que viene a la comunidad sin que se haya producido la obligada comunicación sobre desplazamientos de trabajadores transfronterizos.

Es el caso de muchos trabajadores que acuden cada día desde Portugal a sus puestos en alguna obra de Galicia o que lo hacen de forma semanal, pero que al cotizar por la Seguridad Social lusa, provoca que no exista una estadística fidedigna de cuántos están desplazados realmente. Por ello, entre otras medidas, la Consellería de Traballo propuso que dentro del plan de inspección conjunta con Portugal, la Guardia Civil de Tráfico colabore para controlar los desplazamientos transfronterizos de trabajadores.

De las 33 personas que fallecieron el año pasado en el sector de la construcción, cinco fueron operarios portugueses, lo que representa que este colectivo concentró el 15,15% de los siniestros mortales. No obstante, cuatro de estas cinco víctimas mortales fallecieron en accidentes de tráfico durante desplazamientos a sus puestos de trabajo, de forma que los trabajadores lusos representaron el 44,44% del total de muertes 'in itinere' en la construcción gallega.