En plena discusión con los ayuntamientos sobre la exigencia de que inviertan al menos un 7 por ciento de sus presupuestos anuales en prestaciones sociales, la Vicepresidencia de la Xunta ha decidido "dar un paso" para "disipar las dudas" de los municipios en relación a la futura financiación de estos servicios. El primer esfuerzo lo hará la Administración gallega repartiendo entre las corporaciones locales 63,4 millones de euros, el triple de lo que recibían hace cuatro años para asuntos sociales. La atención a personas dependientes se llevará la mayor parte de este dinero, 43,9 millones de euros.
"Queremos que esto sirva para dar un paso más en la tranquilidad de los ayuntamientos con respecto a la Lei de Servicios Sociais. Aún así, seguiremos hablando con ellos", explicó ayer el vicepresidente Anxo Quintana. La Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) había mostrado su discrepancia con esta normativa porque no estaban de acuerdo con que condicionase los presupuestos municipales al imponer una inversión mínima del 7 por ciento en prestaciones sociales.
"Son dudas razonables. Pero espero que con planes como los de hoy se ayudarán a disipar las dudas de los ayuntamientos sobre la capacidad de financiar esta ley", aclaró Quintana.
Una parte de la inversión prevista para este año por Vicepresidencia se otorgará a los municipios en forma de subvenciones: un total de 39 millones de euros. El resto, unos 24 millones, se destinará al Consorcio de Servicios Sociais. "Queremos desmontar la idea de que la creación de determinados entes se hace en detrimento de la financiación de las corporaciones locales", expuso el número dos de la Xunta.
La prueba de ello, según Quintana, es el "aumento exponencial" de la financiación directa a los ayuntamientos en materia de servicios sociales. Se pasó de 18,7 millones de euros en 2004 a los 63,4 millones presupuestados para este año.
Una de las prioridades será la atención a personas dependientes en el hogar, servicio que recibirá 20,9 millones de euros, tres veces más de la partida que se había destinado a este concepto en 2004.
A mayores se destinarán partidas, en forma de subvenciones, para que las corporaciones locales realicen programas de accesibilidad y supresión de barreras, para la integración del pueblo gitano o para la atención a personas desfavorecidas. "El reto es consolidar el sistema gallego de bienestar", aseguró Quintana.
Veintitrés millones para construir 33 centros
Además de financiar programas de atención social, la inversión prevista por la Vicepresidencia de la Xunta incluye una partida de 23 millones de euros para la construcción de nuevos equipamientos.
La planificación del departamento de Anxo Quintana contempla obras en treinta y tres nuevos centros de día y de atención residencial. Algunos de ellos ya están en construcción como los previstos en las localidades de Begonte, Cospeito, Lourenzá, Pantón, Mondariz, Carballeda de Avia, Vilar de Santos, Xinzo de Limia, Cariño, Nogueira de Ramuín, Parada do Sil, Vilar de Barrio y Muíños.
Otras residencias están en fase de licitación y adjudicación como es el caso de los centros previstos en Vigo, Culleredo, San Sadurniño, Carballo, Tomiño, O Porriño, Ares y Rois.
Todas estas obras contarán en 2008 con un presupuesto de 23 millones de euros, seis millones más de lo que se invirtió en equipamientos el año anterior. En 2004 las partidas destinadas a estas infraestructuras se reducían a 3,1 millones de euros.
La secretaria xeral de Benestar, Chus Lago, explicó que la previsión es que a principios de 2009 Galicia cuente con un total de 55 centros de día.
