Otra de las novedades que incorporó el año pasado este tanatorio vigués es el "Homenaje a una vida", consistente en un emotivo acto de despedida a un ser querido. "El servicio esta yendo bien", tal y como indica Pedro de Diego. El acto se basa, generalmente, en una reunión dirigida por un maestro de ceremonias en la que se pone música seleccionada por los allegados del difunto y se intercalan discursos en recuerdo del fallecido. No está reñido con el funeral religioso, aunque depende del sacerdote dar su conformidad a que se haga intercalado con el acto litúrgico.
