Javier Gómez Noya (Basilea, Suiza, 23, marzo, 1983) es accesible, cercano y transmite la sensación de ser un deportista al que los triunfos y las grandes gestas le colocan en el escenario de la naturalidad, alejado de otros iconos mediáticos que viven rodeados de excentricidades. Lo demuestra cuando habla. Seguro, firme, sin alzar la voz. Pero consciente de que cada palabra es importante.

El triatleta es el padrino del Desafío Pastor Islas Cíes que se disputará el 27 de septiembre en la playa de O Vao. Será el regreso a una ciudad que conoce, también por residir en Pontevedra. Fue el 14 de septiembre de 1998 cuando disputó en Samil su primer triatlón. Terminó sexto. Tenía quince años.

Se iniciaba entonces una carrera deportiva de grandes éxitos. Logró la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012, fue cuarto en Pekín, tiene tres títulos europeos y cuatro de las Series Mundiales. Aspira a un quinto y así superar al británico Simon Lessing, con el que está empatado. Desde 2007 ha mantenido una gran regularidad, ya que siempre ha estado entre los tres primeros. En su trayectoria figuran infinidad de triunfos, victorias épicas y gestas al alcance de pocos.

Sus logros también han sido reconocidos en el aspecto institucional. Mejor deportista gallego en 2007, medalla de oro al mérito deportivo en 2013 y de plata en 2008 y finalista, junto a David Cal, del premio Príncipe de Asturias en 2013, galardón que finalmente logró el golfista José María Olazábal.

-Repasamos su historial deportivo y es enorme. ¿Puede decirme cuantos trofeos y medallas tiene su casa?

-No los he contado. La verdad. Podría decir que sesenta, pero desconozco el número exacto. Son muchos triunfos y también podios.

-Y todavía aspira a varios más.

-Para eso trabajamos. Espero que sea así.

-En el pronóstico más realista figura el ser de nuevo campeón de las Series Mundiales por quinta vez. ¿Lo comparte?

-Lo comparto, pero no será fácil. Es cierto que soy el líder de la clasificación en estos momentos y que tengo buenas sensaciones. Pero todavía quedan muchas pruebas y duras. Además, con rivales muy poderosos. Es un desafío enorme tener más títulos que nadie. Es un largo camino por recorrer.

-Habla de sus rivales. ¿Los principales son los hermanos Alistair y Jonathan Brownlee?

-Sin duda han sido mis grandes adversarios en los últimos años. He competido muchas veces contra ellos. Les conozco bien. Existe una gran rivalidad y eso creo que nos ha beneficiado en muchos sentidos. Me ha permitido crecer como deportista, ya que me han obligado a esforzarme todavía más.

-¿Confía en volver a superarles este año?

-El título va a ser muy competido hasta la última prueba en Chicago. De eso no tengo duda, además de ellos hay un grupo de deportistas que estamos muy igualados. Podría nombrar a Sven Rieberer, Joao Pereira, Vicent Luis o Richard Murray. Entre todos ellos estará en juego el título.

-Usted tiene ventaja en la clasificación ahora mismo. Dicho de otro modo, es favorito. ¿Se considera así?

-Creo que el título se va a decidir en la última carrera en Chicago. Ese es mi pronóstico. Claro que las otras también sirven y son muy importantes. El que mejor llegue a esa prueba será el ganador. Soy favorito por ser líder, pero no por otras cosas. En cada competición puede pasar de todo. Es imprevisible.

-¿Puede desvelar su secreto para mantenerse en forma?

-Una buena preparación durante la pretemporada. Eso es esencial. Después hay que trabajar, ser constante y tenaz. Esas son algunas de las claves.

-¿Se podría decir que esta es su mejor temporada?

-En cada temporada siempre aprendo algo y llevo ya quince años en el triatlón. El aprendizaje y la madurez provoca que cada vez cometa menos errores en las pruebas. Me conozco mucho más y leo mejor cada situación. Son cuestiones también importantes y que se pueden considerar decisivas.

-Sorprende que hable de aprendizaje cuando usted es un especialista mundial con tantos títulos. ¿No puede resultar extraño?

-En el deporte hay que estar siempre alerta y aprender. Si es necesario en la base, en la alta competición es vital. También debes conocer a tus rivales cada vez más.

-Sus triunfos y también su forma de afrontar la competición le han convertido en ejemplo a seguir.¿Se considera un ídolo?

-Puedo ser un referente en el mundo del triatlón y a nivel deportivo en general, pero no un ídolo. Eso es evidente. Pero también hay otros deportistas que pueden llegar a ser ídolos. También es evidente que el triatlón no tiene tanta repercusión mediática como otras modalidades. Es importante la difusión en los medios de comunicación. En eso sí que puedo colaborar y mucho. El triatlón ha crecido de manera espectacular en los últimos años y eso es bueno. Espero que siga así.

-En el Desafío Pastor Cíes será el hombre a seguir. ¿Supone algo especial para usted volver a competir en Vigo en el mes de septiembre?

-Es una prueba espectacular, sin duda. Por el entorno, por el ambiente y por la exigencia de la competición. Particularmente tiene muchos alicientes. Será después de acabar las Series Mundiales y espero celebrar el título aquí. También me voy a encontrar con muchos amigos. Conozco bien la zona y será algo increíble. También tiene algo de emotivo, ya que hace muchos tiempo que no tenía la oportunidades de competir aquí.

-Y será el padrino también de la prueba de los jóvenes el día anterior. ¿Puede darles algún consejo?

-Que se asocien al triatlón. Es un deporte exigente pero que da muchas satisfacciones. Y también que los padres les apoyen. Es necesario que la cantera pueda crecer. En Galicia ya hay buenos deportistas que están destacando.

-¿Se puede decir que ya hay un relevo para usted cuando se retire de la competición?

-Hay una buena cantera y eso es importante para el triatlón, pero considero que se debe fomentar todavía más esta modalidad deportiva. La promoción y la difusión es algo básico y en eso puedo colaborar, en darlo a conocer al gran público.