La impermeabilización de las embarcaciones con estopa y brea, lo que conocemos por calafateado, es uno de los procesos más importantes llevados a cabo por los carpinteros de ribera desde los primeros tiempos de la navegación. Existe documentación sobre barcos fenicios e incluso egipcios en los que ya se utilizaba esta técnica que impide que entre agua en la nave y que protagoniza una de las exposiciones de esta edición de la Arribada.

En el Casal do Rexemento (Casa do Concello) se inaugura hoy, a las 13.00 horas, “O Calafate: un oficio de ribeira”, una muestra que tiene como eje el calafateado de la Pinta. “Según la tradición, al regreso del Nuevo Mundo, la carabela se carenó y calafateó en la ribera de Baiona. Así lo refleja una placa en el número 4 de la calle Elduayen, el lugar donde se dice que se reparó la embarcación”, explica el historiador Anxo Rodríguez Lemos.

En la muestra se hace un recorrido por este oficio desde el siglo XV hasta las últimas carpinterías de ribera que hubo en Baiona, con el fin de explicar al público todo el proceso y mostrar las herramientas que se utilizaban, incluidas algunas ya en desuso con las que probablemente se calafateó la Pinta.

El interés del historiador por la carpintería de ribera se remonta a su adolescencia, cuando comenzó a recopilar herramientas que ahora expone en su casa de forma permanente. Precisamente, la mayoría de las piezas que se exhiben en el Casal do Rexemento pertenecen a su colección. También hay otras cedidas por Manuel Costas Gómez ‘Kanikí’, el último carpintero de ribera que hubo en Baiona, a quien se rendirá homenaje este mismo mediodía durante la inaguración.

“‘Kanikí’ empezó en la carpintería de ribera de Daniel Esperón Millán -relata el historiador-, en la playa Ribeira, cerca de la entrada al Parador. Entre otras muchas embarcaciones, construyó tres gabarras utilizadas durante la construcción de la doca baionesa para transportar la piedra desde el muelle”.

A los martillos, los cinceles y demás herramientas propias del calafateado se unen en la exposición diversas maquetas de embarcaciones, tanto tradicionales como de las tres carabelas, cedidas por Jesús Cedeira Carneiro, marinero y carpintero de Baiona.

“Las embarcaciones de madera siguen requiriendo del calafateado y, aunque ahora hay siliconas que desplazaron al sistema tradicional, hay propietarios de barcos que lo sigue prefiriendo”, afirma Rodríguez Lemos.