Un portavoz de Médicos Sin Fronteras (MSF), Javier Sancho, informó hoy de que el personal de la ONG en Bossaso, al norte de Somalia, donde han sido secuestradas dos de sus trabajadoras, está siendo evacuado "de forma parcial" a Mogadiscio y otras zonas más seguras.

Respecto a las dos secuestradas, Sancho confirmó que se trataba de una "médica española y una enfermera argentina" que se encontraban "trabajando", de camino a un centro nutricional para niños. Entonces, según él, fueron "llevadas por la fuerza", aunque no saben "quién ha sido, y si ha sido un grupo". "Todavía no han sido liberadas", avanzó.

Las dos trabajadoras de MSF eran Mercedes García, natural de León, y Pilar Bouza, de Argentina, según confirmó a Europa Press otro portavoz de MSF, Jaume Codina. Trabajaban en un proyecto de nutrición de emergencia, en marcha desde mayo, en el que participaban ocho internacionales y 100 somalíes, en la región de Puntland de Somalia.

Según aseguró Sancho en declaraciones a la prensa, las dos mujeres tenían "experiencia", ya que el proyecto "requiere intervención rápida" y la "atención de los pacientes dependía" del personal de MSF. Además, señaló que ambas iban identificadas como miembros de la ONG.

El portavoz de MSF relató que la ONG ha podido contactar con las familias, que están "muy preocupadas" por el estado de las mujeres. Por otra parte, Sancho hizo hincapié en que la situación del personal humanitario es "mucho más precaria que antes", porque ser miembro de una ONG no garantiza la seguridad.

No obstante, se mostró esperanzado en que la liberación se produzca "lo más pronto posible", ya que "normalmente" el personal humanitario secuestrado "es liberado". "Esperamos que así sea", apostilló.