El Rey defendió su cometido institucional y rechazó asumir un papel mediador en el conflicto catalán. Ante las críticas de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, por no haber condenado las cargas policiales de la jornada de referéndum, Felipe VI sostuvo que su papel "es defender la Constitución y el Estatuto".

Fue en el Palau de la Música y en una conversación previa a la cena institucional del Congreso Mundial de Móviles, que ayer abrió sus puertas en Barcelona. Colau, quien como el presidente del Parlament Roger Torrent no estuvo en el saludo a la llegada del monarca, se acercó a Felipe VI antes de sentarse a la mesa que compartían y departieron unos minutos. Según el propio relato de la alcaldesa, "el Rey fue muy educado y, resumidamente, me dijo que su papel era defender la Constitución". Ante esa afirmación de que "su trabajo y su rol institucional es defender la Constitución yo le dejé muy claro que eso no se lo cuestiono, que lo daba por hecho, pero que (la Constitución) se puede defender de muchas maneras diferentes y que creo que con cargas policiales en escuelas con gente pacífica no es la mejor manera". En un ambiente de cierta tensión, propiciado por el boicot institucional catalán al monarca que la alcaldesa encabezaba, Colau sostuvo que "hay maneras más constructivas y positivas" de defender la Carta Magna que las actuaciones policiales y sugirió al monarca que adoptase una posición más conciliadora que pudiera contribuir a suavizar el conflicto catalán. Según algunos de los presentes, el Rey replicó a la alcaldesa que su cometido no consiste "en mediar entre quienes cumplen la ley y quienes la incumplen".

Colau, quien en la mañana de ayer acompañó con normalidad a Felipe VI en el paseo por el recinto ferial, tendrá que dar explicaciones por la actuación de la Guardia Urbana contra las protestas en la calle por la presencia del monarca en Barcelona. El PDeCAT y la CUP criticaron ayer los "golpes de porra contra manifestantes pacíficos" en las inmediaciones del Palau de la Música, escenario de la cena de la inauguración del Mobile World Congress (MWC). "Hemos visto, desgraciadamente, a agentes de la Guardia Urbana infligiendo violencia y golpes de porra contra manifestantes pacíficos. No entendemos cómo se ha producido esta circunstancia", manifestaba ayer el concejal del PDeCAT Jordi Martí.

"Que alguien desconozca sus obligaciones institucionales o necesite hacerse notar es un tema menor que en ningún caso puede empañar algo tan importante" como el congreso mundial de móviles, afirmaba ayer en Túnez el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para descalificar el boicot institucional de la alcaldesa y del presidente del Parlament.

El secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, defendió la postura Colau con el argumento de que "rendir pleitesía a un Rey no va con nosotros". "Lo que hemos visto estos últimos días no es lo que debería ocurrir en Cataluña", lamentaba ayer tras la reunión de la Ejecutiva del PSOE su responsable de Economía, Manuel Escudero, para quien si tanto Colau como Torrent "siguen acumulando errores, desatendiendo sus obligaciones y su posición institucional" puede verse comprometida la continuidad del MWC .