El expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps declaró ayer ante el juzgado de Instrucción número 17 de Valencia como investigado en una causa abierta por presuntas irregularidades en la construcción del Circuito de la F1 en Valencia. El procedimiento, declarado secreto, está en manos de la Fiscalía Anticorrupción y además de Camps figuran al menos ocho investigados más, la mayoría cargos públicos de la época del PP y administradores de empresas.

Después de comparecer varias horas ante el juez, Camps aseguraba ayer tener "tranquilidad absoluta" y la "conciencia de haber hecho algo extraordinario para Valencia" al llevar la Fórmula 1. Antes, tras salir del pleno del Consell Jurídic Consultiu y cuando se dirigía a declarar al juzgado, el que fuera presidente de la comunidad mostraba su extrañeza por la investigación judicial al considerar que, en lo relativo a la competición automovilística "se hizo todo fenomenal". Camps defiende que la F1 sirvió para atraer turismo a Valencia y pide reconocimiento público para su gestión.

El juzgado de Instrucción número dos de Valencia investiga también a Camps por asuntos relacionados con la F1. La causa en fase de instrucción tiene su origen en una querella de la Fiscalía por presuntas irregularidades en la organización del Gran Premio de la especialidad. La investigación se centra en los posibles delitos de prevaricación administrativa y malversación de caudales públicos.