Carles Puigdemont planteó ayer en Copenhague que si un 50% de catalanes no basta para que Cataluña tenga Estado, tampoco debería valer para que no lo sea: "¿Hay suficiente con un 50% de la población para quedarse en España?".

Lo dijo a preguntas de la profesora Marlene Wind, experta en relaciones entre derecho y política, con la que debatió en su primera salida de Bélgica en más de 80 días.

"¿Es usted un provocador que genera polarización y dificulta el acuerdo?", se le preguntó también. Y respondió: "No soy provocador, soy periodista. Tengo un estilo de comunicación directa", dijo.

La profesora Wind intentó poner en aprietos al expresident con una pregunta simple: "¿Democracia es solo hacer referendos y encuestas de opinión o también respetar la legalidad y la Constitución?". O: "¿De dónde viene esta urgencia por la independencia? A mi entender, Cataluña es la región más rica de España. ¿Son solo unos malcriados que están intentando librarse de los pobres?", le espetó.

Experta

Wind había prometido ser "provocadora" y lo logró: varias veces durante el debate se vio a Puigdemont sonreír incómodo ante sus preguntas. Así que optó por responder a su sarcasmo con más sarcasmo: "Ha dicho que no es usted experta en asuntos españoles, estoy de acuerdo".

La profesora le preguntó si su idea de Europa es la de "doscientos estados 'limpios', que tengan una sola identidad". "Es un camino muy peligroso" que pone "realmente nerviosa" a la propia UE.

En su intervención, antes de debatir con Wind, el expresidente catalán afirmó que en España la "sombra de Franco es aún muy larga", y consideró que "una solución o una propuesta" para resolver la crisis catalana es que votara "todo el Estado". El político cerrará hoy su viaje a Dinamarca reuniéndose con diputados de los territorios autónomos de islas Feroe y Groenlandia.