La defensa del exvicepresidente de la Generalitat de Cataluña y líder de ERC, Oriol Junqueras, defenderá este jueves durante la vista que acoge el Tribunal Supremo para decidir sobre su situación de prisión provisional que no existen riesgos para mantenerle preso y apelará a su derecho de participación política tras las elecciones catalanas del 21 de diciembre en las que ha resultado elegido diputado.

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, integrada por los magistrados Miguel Colmenero, Francisco Montende y Alberto Jorge, tendrá que decidir si atiende a su petición o levanta la medida de prisión que pesa sobre él desde el pasado 2 de noviembre por los delitos de rebelión, sedición y malversación por su implicación en el proceso independentista.

En el recurso presentado a la Sala de Apelaciones el pasado 21 de diciembre su abogado Andreu van den Eynde alegaba que ya no persistían los supuestos por los que la magistrada de la Audiencia Nacional Carmen Lamela acordó su ingreso en prisión, ya que no existe riesgo de fuga ni de reiteración delictiva.

En su petición de libertad, el líder de ERC tendrá en contra a la Fiscalía y a la acusación popular que ejerce Vox, partidarios de que se le mantenga en prisión. El Ministerio Público alegó en su escrito remitido a la Sala de Apelaciones que todavía existen indicios que sostienen la rebelión y basó su postura en el documento 'Enfocats' encontrado en el domicilio del número 2 de Junqueras en Economía, Josep María Jové y considerado como hoja de ruta del 'procés'.

Argumentario

Es fácil prever que la defensa quiera que al final de la vista, que comenzará a las 10.30 horas, el líder de la formación independentista se dirija directamente a la Sala teniendo en cuenta que en su recurso al auto del magistrado instructor de la causa, Pablo Llarena, se solicitó que pudiera estar presente en la cita judicial.

Considera que tiene derecho a defender su proyecto político e incluso no descarta que pueda ser presidente de la Generalitat en caso de pacto entre su formación y JuntsxCat. Además ha explicado que si la Sala le mantiene en prisión, pedirá un permiso para poder asistir el 17 de enero a la sesión de constitución del parlamento catalán.

Tampoco descarta solicitar el traslado a una cárcel catalana para facilitar que pueda acudir a los plenos de la cámara regional y garantizar que se mantenga el ejercicio de los derechos políticos, según ha dicho. El calendario establece el 31 de enero como fecha límite para la celebración del debate de investidura del próximo presidente catalán y un día después se celebraría la votación en la cámara regional.

Según informan fuentes jurídicas, será trasladado a primera hora de la mañana desde la prisión de Estremera hasta los calabozos de la Audiencia Nacional, ubicada a apenas unos pasos del alto tribunal. De ahí será conducido en coche ante la sala, que se encuentra a apenas unos metros del órgano judicial. Con todo, cabe la posibilidad de que los magistrados no se pronuncien este jueves y posterguen su decisión para los próximos días.