El artículo 155 de la Constitución es el argumento central del PP en la recta final de la campaña de las elecciones catalanas. Los populares intentan, por un lado, evitar que Ciudadanos capitalice en exclusiva la decisión de intervenir la Generalitat y conjurar a la vez la amenaza de que una nueva mayoría soberanista vuelva sobre la senda del "procés" y retome la república. "Todos saben lo que hay que hacer para que se active y lo que no hay que hacer para que no se active", avisó ayer el presidente Rajoy en un mitin en Salou (Tarragona).

El jefe del Gobierno reivindicó su decisión, pese a las dudas que generaba en otros partidos, de aplicar el artículo 155 de la Carta Magna en Cataluña. El PP trata de arrebatarle esa bandera a Ciudadanos que, a tenor de las encuestas, puede coronarse el próximo jueves como la fuerza más votada. La candidata del partido de Rivera, Inés Arrimadas, se apropió de la intervención de la administración catalana atribuyéndola al resultado de su exigencia firme de que se pusiera fin al desafío secesionista. Para Rajoy se trata de un mérito indiscutible de los populares y fue la primera "solución a la deriva independentista".

El ascenso electoral de Ciudadanos lleva al PP al lugar más bajo de la tabla de resultados en los comicios y en algunos sondeos aparece como la última fuerza, por debajo de la CUP, con un suelo de hasta seis diputados, lo que supondría cinco menos que en la anterior legislatura.

Rajoy advirtió ayer a los soberanista de que no vuelvan por sus fueros. Con la incógnita de si el jueves conseguirán reeditar su mayoría absoluta y la lectura de los comicios como una reafirmación de la consulta ilegal del primero de octubre el independentismo debe ser consciente de los efectos del 155. "Todos saben lo que hay que hacer para que se active y lo que no hay que hacer para que no se active", advirtió ayer el presidente. Su aviso, en uno de los principales actos de campaña, venía a sumarse al que ya el sábado lanzó Pedro Sanz, vicepresidente primero del Senado, quien avisó de que los populares "estamos preparados para todo. Para que las cosas funcionen bien y para que, si funcionan mal, le apliquemos el tratamiento adecuado". El futuro Govern de Cataluña debe ser consciente de que "si no funciona de acuerdo a la ley, ya sabe lo que pasa: vuelve otra vez a aplicarse la ley", afirma Sanz. Para apoyar la imagen de firmeza de Rajoy, la presidenta Soraya Sáenz de Santamaría le atribuyó el mérito de "haber descabezado" al secesionismo.

El de ayer fue uno de los días principales de la campaña. Los partidos que concurren a las elecciones entraron el recta final con actos de gran reclamo, como el del socialista Miquel Iceta acompañado del expresidente Rodríguez Zapatero y de Josep Borrell, que reunió a 5.000 personas en Barcelona. Reivindicando su papeleta como la única "para la solución", Iceta ha alertado del peligro del "PP y su media naranja", en alusión a Cs.

La candidata de Ciudadanos Inés Arrimadas eligió Hospitalet de Llobregat como escenario de un multitudinario acto central de campaña en el que estuvo acompaña por Albert Rivera. Ambos defendieron que el voto a Ciudadanos representa el "cambio" real para abrir una nueva etapa, en la que Cataluña "vuelva a levantarse" y "empiece la remontada al nacionalismo".