El PP se sentará en el banquillo de los acusados por la destrucción de los ordenadores de su extesorero Luis Bárcenas. Será el primer partido político en encontrarse en esa situación después de que la Audiencia de Madrid confirmase el procesamiento de la organización, de su tesorera y varios asesores por presuntos delitos de daños informáticos y encubrimiento, por el supuesto borrado de los discos duros de los ordenadores usados por Bárcenas en su sede.

La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Madrid desestimó los recursos presentados por el Ministerio Fiscal; el PP; la tesorera, Carmen Navarro; el asesor jurídico, Alberto Durán, y el director de sistema de información del partido, José Manuel Moreno. Los recurrentes del auto que transformaba las diligencias previas en procedimiento abreviado pedía la nulidad de la causa por considerar que faltaban elementos precisos para que siguiera adelante. La Audiencia rechaza los argumentos de los recurrentes y considera que hay "indicios suficientes" de la comisión de posibles delitos de daños informáticos y de encubrimiento. Antes de esta resolución, la sección 23 de la Audiencia Provincial desestimó los intentos del PP de recusar a la juez instructora del caso, Rosa María Freire, a la que acusaba de enemistad "manifiesta" contra el partido.

La nueva decisión de la Audiencia concede mayor credibilidad a la versión de Bárcenas que a los recurrentes sobre el contenido de los ordenadores Los procesados sostienen que los equipos carecían de contenido, lo que negó el extesorero. La Audiencia cree que la versión de Bárcenas "no resulta inverosímil", cuestiona la existencia de un "protocolo de borrado seguro" y advierte indicios de que en realidad se tratara de borrar datos perjudiciales para los intereses del PP.