El interlocutor de Bélgica "es el Gobierno de Madrid" y el expresidente Puigdemont "un ciudadano europeo que debe responder de sus actos", sostuvo ayer Parlamento federal el primer ministro belga, Charles Michel. En un debate de hora y media centrado en la crisis catalana y el papel de Bélgica desde la llegada el 30 de octubre de Puigdemont a Bruselas, Michel tuvo que hacer frente a las críticas por lo que algunos consideran tibieza de su Gobierno frente al de Rajoy. "No hay ninguna ambigüedad. Tenemos un interlocutor que es el Gobierno de Madrid, el Gobierno de España, por todos los canales diplomáticos", afirmó Michel.

El Parlamento flamenco rechazó ayer por amplia mayoría una moción presentada por el partido de extrema derecha Vlaams Belang para pedir el reconocimiento de la independencia de Cataluña, una propuesta que sólo sumó cuatro de los 99 votos de la Cámara. El texto pedía también condenar las medidas del Gobierno contra el secesionismo.

Los distintos partidos políticos con presencia en la Cámara flamenca, sin embargo, tienen como norma tumbar toda propuesta que provenga del partido de extrema derecha, sea cual sea su contenido.