El Fondo Monetario Internacional (FMI) destacó la fortaleza de la recuperación de España, manteniendo su pronóstico de un crecimiento del 3,1% en 2017 y del 2,5% en 2018, aunque ha advertido de que "no debe darse por sentado" el reciente dinamismo de la economía por lo que es necesario preservar las reformas adoptadas e incluso profundizar en las mismas, señalando que prolongar las tensiones e incertidumbre relacionadas con Cataluña puede lastrar la evolución de la economía.

"Las perspectivas actuales para la economía española son fuertes", declaró en una conferencia telefónica Andrea Schaechter, jefa de la misión de la institución internacional para España, quien advirtió de que "tensiones prolongadas y la incertidumbre relacionada con Cataluña podrían pesar sobre la confianza y las decisiones de inversión".

Por otro lado, al referirse a la evolución de la economía española, el FMI destaca que "gracias a las pasadas reformas", la economía se ha hecho más competitiva, flexible y resiliente, aunque advierte de que España aún tiene por delante retos como los elevados niveles de deuda pública y desempleo estructural, así como el envejecimiento de la población y retrasos en productividad.

De este modo, ante la perspectiva de que algunos elementos favorables para el crecimiento vayan disipándose, el FMI considera "imperativo" preservar las reformas estructurales y las ganancias de productividad alcanzadas, añadiendo que serán necesarios más ajustes y reformas, incluyendo la del mercado laboral, para elevar el potencial de crecimiento y que la recuperación sea más inclusiva y sostenible.

En este sentido, la institución recuerda que el país cuenta con escaso margen fiscal para adoptar medidas contracíclicas frente a dificultades, además de que el envejecimiento de la población implica una significativa presión sobre el gasto a medio y largo plazo, subrayando que el margen para realizar medidas de carácter estructural reposa sobre los ingresos, para lo que recomienda mejorar la recaudación de impuestos como el IVA, reducir las ineficiencias del sistema, subir tasas e impuestos medioambientales o mejorar la eficiencia del gasto.

Los expertos del FMI señalan la importancia de aplicar completamente las reformas pactadas entre 2011 y 2013 para aliviar las presiones demográficas sobre las pensiones contributivas, ya que en caso de no implementarlas el gasto se dispararía.

De este modo, apuestan por medidas que contribuyan a la equidad intra e inter generacional para impulsar la aceptación de las reformas del sistema de pensiones, ya que la carga del ajuste recae en España sobre los futuros pensionistas, mientras que las pensiones de los jubilados se vieron protegidas de la crisis económicas.

Asimismo, el FMI recomienda medidas que incentiven vidas laborales más prolongadas, restringiendo el acceso a la jubilación anticipada, ampliando el periodo de referencia para el cálculo de la pensión, así como vincular la edad de jubilación a los cambios en las expectativas de vida y revisar las razones que permiten el cobro de múltiples pensiones.