El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lanzó anoche una dura advertencia al Ejecutivo autónomo catalán: "A los gobernantes de la Generalitat les recomiendo que cesen en sus actividades ilegales. Saben que este referéndum ya no se puede celebrar. Ahora ya no es más que una quimera imposible", dijo el jefe del Ejecutivo en una declaración institucional transmitida por televisión, en la que advirtió a los dirigentes independentistas de que "están a tiempo de evitar males mayores". Para cada ilegalidad y vulneración de la ley en la que incurran habrá una respuesta "firme, proporcionada y rigurosa", añadió.

"No sigan adelante, no tienen ninguna legitimidad. Regresen a la ley y a la democracia", dijo Rajoy en su alocución, en la que insistió en que no renunciará a ninguno de los instrumentos del Estado de derecho para, a través de "una respuesta integral, evitar que la sinrazón de unos pocos la sufran el conjunto de los ciudadanos".

El líder popular añadió que "lo que está en juego no es una demanda política, está en cuestión el propio fundamento de la democracia" y precisó que "en democracia siempre habrá caminos para defender cualquier posición política", pero también mecanismos para exigir responsabilidades a quienes "con tanta imprudencia" están poniendo en "grave riesgo" la convivencia.

El jefe del Ejecutivo también tuvo palabras para los grupos políticos que apoyan a los independentistas, en alusión a Podemos y sus confluencias, a quienes no citó pero caracterizó como aquellos que "aprovechan el órdago independentista" para "generar inestabilidad en las calles" y debilitar las instituciones. "Les advierto que tendrán que responder ante los españoles de su deslealtad en un momento tan decisivo de la vida política", apostilló.

Desde las filas independentistas, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, acusó al Gobierno, también en declaración institucional, de "enterrar la política y abrir definitivamente la puerta a la represión" contra el referéndum. La líder secesionista llamó a los catalanes a "no tener miedo", a mantenerse "unidos ante estos ataques antidemocráticos" y a votar el próximo 1 de octubre. Para Forcadell, "hoy (por ayer) han sido atacadas las instituciones de Cataluña, el autogobierno" y la "dignidad del pueblo de Cataluña".