El marroquí sospechoso de terrorismo que permanece detenido en Marruecos pretendía atentar contra la Embajada española en Rabat y se radicalizó durante sus diez años de residencia en España. El hombre, originario de Nador, tenía también entre sus objetivos Melilla e instituciones marroquíes, según desveló ayer un jefe policial de Marruecos. El detenido, según la fuente, no tiene relación con los recientes atentados de Cataluña.