Alrededor de un millar de inmigrantes subsaharianos intentó a primera hora de ayer un nuevo asalto masivo al perímetro fronterizo que separa la ciudad autónoma de Ceuta con Marruecos. En la acción resultaron heridos tres guardias civiles y una decena de agentes marroquíes.

Durante toda la madrugada de ayer, las fuerzas de seguridad del Estado estaban alertados ante el nuevo intento, que se produjo unos trescientos metros más arriba de donde se ubica la conocida Finca Berrocal y donde se registraron los últimos asaltos.

La rápida y contundente actuación de las autoridades marroquíes logró que sólo unos trescientos inmigrantes consiguieran llegar hasta el vallado fronterizo, donde fueron contenidos por los agentes del Grupo de Reserva y Seguridad de la Guardia Civil.

La comandancia de este cuerpo de seguridad en la ciudad de Ceuta informó ayer, según la agencia Efe, que el numeroso grupo de subsaharianos mostró una violencia extrema con lanzamientos de piedras, palos y armados con lanzas rudimentarias y objetos punzantes, lo que causó heridas a tres guardias y a una decena de agentes marroquíes.