El secretario general, Pedro Sánchez, ha asegurado hoy que "la crisis territorial no se resuelve con amenazas por tierra, mar y aire", sino con "diálogo y mesura" en alusión a la reacción del Gobierno ante la posible celebración del referéndum catalán el 1 de octubre.

Sánchez ha clausurado hoy en la sede del Conservatorio de Música, en Palma, el 13 Congreso de los Socialistas de Baleares, que ha ratificado a Francina Armengol, actual presidenta del Govern balear, como secretaria general del PSIB-PSOE.

El líder socialista ha insistido en que "las soluciones para Cataluña pasan por la ley porque fuera de la ley no hay nada", pero ha advertido que en estos seis años se ha demostrado que "con la ley no basta, que falta la política".

Para Sánchez, a "un presidente de Gobierno hay que pedirle mirar alto, lejos, que haga política, que encuentre soluciones justas".

Ha reiterado el apoyo de los socialistas al Gobierno en defensa de la ley y la Constitución en relación a la amenaza del referéndum y ha señalado la "llamada al encuentro" que ha hecho al PSOE en este asunto con la Declaración de Barcelona.

No obstante, Sánchez ha acusado al Gobierno del PP de haber dejado "pudrir el problema catalán" durante seis años, mientras ha apuntado que "no habrá estabilidad en España hasta que no haya un Estado federal".

"Ni el Estado es el gobierno actual ni España es el Partido Popular", ha apuntado el socialista.

"Queremos una alternativa política y social que sume y multiplique, no queremos una vía unilateral, ilegal, estrecha, proponemos una gran avenida de diálogo, negociación y pacto común. Queremos compartir con Cataluña un futuro común", ha insistido Sánchez, para quien el 1 de octubre es "todos los días".