El líder del PSOE, Pedro Sánchez, reconoció ayer, tras entrevistarse con el Rey Felipe VI, que le ha visto "preocupado" por la deriva que está adquiriendo el desafío independentista en Cataluña. Sánchez, en su primera rueda de prensa desde que recuperase la secretaría general socialista el pasado 21 de mayo, adelantó que en su reunión de hoy con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le pedirá que "dé un paso hacia una salida política" al conflicto catalán. "Yo lo daría", afirmó el líder socialista, quien prometió que si Rajoy da ese paso, "contará con el apoyo del PSOE".

En su entrevista con el Monarca, Sánchez le explicó que defiende el "reconocimiento de la identidad nacional" de algunas comunidades autónomas, eso sí, defendiendo la premisa de que "sólo hay una soberanía y un Estado".

En la audiencia, el líder socialista transmitió al Rey su plena "disposición a fortalecer el Estado" y la necesidad que hay, a su juicio, de llevar adelante un "proyecto de renovación nacional" basado en diez compromisos, entre ellos, la reforma de la Constitución y el reconocimiento de la plurinacionalidad del Estado español.

Convencido de que "el consenso, en lo que respecta al modelo territorial, está roto", Sánchez sostiene que es preciso abordar una reforma constitucional para "culminar la estructura federal del Estado" iniciada con el sistema autonómico de 1978.

Para el secretario general del PSOE, el referéndum independentista, que se celebrará "o no" el 1 de octubre, "sitúa a Cataluña fuera de la legalidad de la Constitución y del Estatuto" y carece de las "garantías necesarias". Pero "lo importante", añadió, "es que Rajoy no se quede sólo en la legalidad".

Igualmente, ha confirmado que los próximos 14 y 15 de julio viajará a Barcelona para reunirse con el PSC, cuya posición ante la ilegalidad de la consulta comparte. El desplazamiento responde a la proclamación de Miquel Iceta como candidato a la presidencia de la Generalitat en las próximas autonómicas.