Susana Díaz seguirá al frente del socialismo andaluz tras el congreso de finales de julio. Unos 25.000 afiliados, algo más de la mitad del censo de la militancia, respaldaron su precandidatura mientras que su único rival en este proceso preliminar quedó muy lejos de reunir los 4.850 avales necesarios para concurrir a las primarias a la secretaría general.
"No tengo manera de devolver tantísimo cariño a todos los que nos están ayudando a que levantemos el PSOE para levantar Andalucía, porque somos el proyecto que mejor defiende a esta tierra", afirmó ayer Díaz después de que se cerrase el proceso de recogida de avales y se conociesen los números provisionales.
El respaldo abrumador de la militancia compensa a la presidenta de su fracaso ante Pedro Sánchez en el proceso interno para liderar el PSOE nacional. El único contrincante de Díaz fue Francisco Tirado, un militante de Linares (Jaén), afín al actual secretario general del partido, que reunió menos de 800 avales.
El de los socialistas andaluces será, los días 29 y 30 de junio, el primer cónclave regional tras el congreso federal. El entorno de Díaz aceleró su celebración ante el temor a que se pudiera gestar alguna alternativa.
