La Guardia Civil está interrogando como testigos a funcionarios catalanes e incluso a un cargo de confianza de la Generalitat en el marco de una investigación judicial sobre los preparativos de la consulta anunciada por Carles Puigdemont para el 1 de octubre.

Las pesquisas se centran en el censo de catalanes en el exterior y la página web del Pacto Nacional por el Referéndum, que el departamento de Presidencia se encargó de lanzar. El cargo de confianza interrogado es el responsable de redes sociales de la Generalitat y está adscrito, precisamente, a este departamento.

Los interrogatorios tienen relación con el sumario abierto por un juzgado barcelonés después de que el exjuez y exsenador de ERC Santiago Vidal afirmara que el Govern estaba recopilando los datos fiscales de los catalanes, y no siempre de manera legal.

En el Parlament, Puigdemont advirtió que ni los "espanta-funcionarios" ni los "caza-urnas" lograrán asustar a los ciudadanos que "quieren votar". Y la consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, juzgó los interrogatorios propios del "franquismo".

Puigdemont, además, aseguró que el 1 de octubre habrá urnas para votar, pese a que el martes su Gobierno declaró desierto el concurso público para comprarla, y retó a la oposición a participar y aceptar el resultado.

En la misma sesión, la CUP mostró su "máxima preocupación" ante las "carencias" y "falta de firmeza" del Govern en la organización de la consulta.

Por otro lado, el PP de Badalona, que preside el líder del partido en la comunidad, Xavier García Albiol, votó el martes por la noche a favor de una moción del PSC municipal que defiende la reforma federal de la Constitución y la plurinacionalidad.