La diputada Adriana Lastra será la "número dos" del PSOE como vicesecretaria de la ejecutiva que saldrá del 39º congreso federal del partido, que hoy comienza. Patxi López, rival de Pedro Sánchez en las elecciones internas a la secretaría general, aceptó la oferta de ser secretario de Política Federal en una dirección cuyo núcleo duro está integrado por una veintena de personas que arroparon al actual líder en su caída política y formaron parte de su equipo en la campaña para ser de nuevo número uno.

Con Adriana Lastra, el organigrama de la dirección recupera un cargo que no siempre se cubre -de hecho la anterior dirección encabezada por Pedro Sánchez quedó vacante- y en el que tendrá como antecesores a Alfonso Guerra -después de su salida, la vicesecretaría estuvo sin ocupar más de una década-, José Blanco y Elena Valenciano, estos dos últimos ya en la época de José Luis Rodríguez Zapatero al frente del partido.

Como gesto integrador, el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara presidirá el Consejo Territorial del partido, en el que se sientan los "barones" y donde se dirimen los asuntos de las distintas federaciones. Fernández Vara fue pionero en la defensa de que el PSOE se abstuviera en la segunda votación de la investidura de Rajoy y uno de los mayores respaldos de la presidenta andaluza, Susana Díaz, en las primarias.

Del congreso federal saldrá la nueva orientación política del PSOE, que incluye, entre otras grandes líneas, la búsqueda de apoyos de otros grupos de izquierda para iniciativas de oposición al Gobierno de Rajoy. Pedro Sánchez y el líder de Podemos, Pablo Iglesias, mantuvieron ayer un contacto telefónico, cuyo contenido no trascendió, y se emplazaron para verse una vez que pase el cónclave socialista.

El secretario general de los socialistas se muestra, a tenor de un artículo publicado en un diario nacional, muy crítico con "la nueva política" y con la moción de censura contra Rajoy.

La iniciativa de Podemos "pasará a la Historia como un ejercicio de expectativas frustradas para los millones de ciudadanos que demandan un cambio en nuestro país", señala Sánchez, para quien esos ciudadanos "seguro que sintieron una gran decepción viendo a la nueva política peleándose a garrotazos, mientras Rajoy sacaba réditos del espectáculo", en alusión al duro enfrentamiento que mantuvieron Pablo Iglesias y Albert Rivera, de Ciudadanos.

Pedro Sánchez, espera reunir este domingo a unos 8.000 simpatizantes en el gran acto con el que clausurará el 39 Congreso Federal, bajo el lema "Somos la izquierda".