El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, escogió el día de la dimisión de Manuel Moix para decir que la política es "hacer las cosas a lo grande, fijarse en lo importante y tomar las decisiones que haya que tomar", pero no "ocuparse de los chismes", algo a lo que, "desgraciadamente, estamos muy acostumbrados en los últimos tiempos".

El presidente del Gobierno Rajoy no identificó, en concreto, ningún "chisme", ni quiso contestar a las preguntas que se le hicieron sobre la dimisión de Moix tanto a la entrada como a la salida del acto de UGT que clausuró en Burgos, el primero en el que toma la palabra en sus 35 años de trayectoria política y en el que defendió el mantenimiento de sus políticas económicas.

En su intervención, el jefe del Ejecutivo apostó por el entendimiento con los partidos y los agentes sociales y propuso, por el contrario, "olvidar algunas cosas que algunos mal llaman hacer política".

Fue entonces cuando explicó lo que él entiende por hacer política, "fijarse en lo importante y tomar las decisiones que haya que tomar" y no hacer caso de los "chismes".