La Fiscalía Superior de Cataluña recurrirá ante el Tribunal Supremo en busca de una condena por prevaricación contra Artur Mas y la exconsejeras catalanas Joana Ortega e Irene Rigau que los inhabilite durante ocho años. Los tres fueron condenados este lunes por desobediencia en el juicio del 9-N, pero no por obrar mal a sabiendas.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) absolvió a los tres del segundo delito al entender que la "arbitrariedad" de su decisión de seguir adelante con el proceso participativo -después de su suspensión por el Tribunal Constitucional (TC)- queda incluida en la desobediencia.
Mas recibió una pena de dos años de inhabilitación por desobediencia, Ortega de un año y nueve meses y Rigau de año y medio, pero fueron absueltos del delito de prevaricación.
Ahora, el fiscal recurre la sentencia del TSJC "en coherencia" con la posición que mantiene la Fiscalía del Supremo en la causa contra el diputado del PDECat y exconsejero de Presidencia Francesc Homs, acusado de prevaricación además de desobediencia por los mismos hechos.
También las defensas de Mas, Ortega y Rigau anunciaron el mismo lunes que recurrirán la condena que recibieron por desobediencia, aunque todavía no lo han formalizado ante el Supremo, para lo que disponen de plazo hasta el próximo martes.
Ocho días después, el 29 de marzo, Mas comparecerá en comisión ante el Parlament, tras las acusaciones de que CDC cobró comisiones ilegales del 4% a través del Palau de la Música que fueron aireadas en el juicio por el expolio de la institución cultural.
Ese mismo día, además, se votará la petición de comparecencia de los diputados de Junts pel Sí Germà Gordó y Natàlia Figueras por el mismo asunto.
Por otro lado, el Pleno del TC, recién renovado tras la incorporación este miércoles de los cuatro magistrados designados por el Senado (Ricardo Enríquez, Alfredo Montoya, Cándido Conde-Pumpido y María Luisa Balaguer), no abordará hasta el próximo miércoles la elección de su presidente y vicepresidente.
El conservador Juan José González Rivas y Encarnación Roca, designada a propuesta del Parlament, son los nombres que en principio parecen concitar más apoyos entre sus compañeros para ocupar estos puestos. En el TC domina ahora una mayoría conservadora, pero la renovación es también fruto de un acuerdo entre el PP y el PSOE. Antes de González Rivas sonó para el puesto Andrés Ollero, pero, según algunos medios, fue vetado.
