El Consejo de Ministros aprobó ayer designar al hasta ahora fiscal del Tribunal Supremo Manuel Moix como jefe de la Fiscalía Anticorrupción, un puesto que se encontraba vacante desde que su anterior titular Antonio Salinas se jubiló en octubre pasado. Este es uno de los nombramientos más destacados de los 36 realizados a propuesta del fiscal general del Estado, José Manuel Maza, entre ellos la polémica sustitución de Manuel López Bernal como fiscal superior de Murcia en plena investigación de un caso que puede acabar con la dimisión del presidente regional, Pedro Antonio Sánchez.

El nuevo jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, nacido en 1958 y de tendencia conservadora, ingresó en la carrera fiscal hace 31 años. Era el fiscal superior de Madrid cuando el ministerio público presentó la querella con la que se inició la causa sobre el patrimonio del exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato. Durante la etapa de Moix como jefe, la Fiscalía de Madrid tuvo un papel relevante en la causa contra la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre, inmersa en un proceso judicial por un incidente de tráfico con unos agentes de movilidad en el que se dio a ala fuga. La Fiscalía mantuvo en todo momento que este hecho se trataba de una falta y no de un delito. Alonso pasó después a la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo.

El Consejo de Ministros ratificó también la propuesta de José Manuel Maza de nombrar a Jesús Alonso fiscal jefe de la Audiencia Nacional. Alonso era hasta ahora teniente fiscal de la Audiencia y relevará a Javier Zaragoza, quien llevaba en el cargo dos mandatos.