El proceso de primarias reabre las tensiones internas en el PSOE y comienza a desatar las críticas cruzadas. El apoyo de la exministra Cristina Narbona a Pedro Sánchez desagrada a un sector del partido afín a Susana Díaz, que considera que una representante del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) no debería estar en la campaña de ningún candidato. Narbona participó en la redacción del programa de Sánchez e intervino en su multitudinaria presentación como "militante de base comprometida con la regeneración". "No es una militante de base, es una consejera del CSN ¿Qué hacía allí?", critica desde hace días por los pasillos del Congreso uno de los diputados que más trabaja para que Susana Díaz sea la próxima secretaria general del PSOE, según informa Efe.
Los sanchistas, entretanto, se muestran satisfechos con el impacto: "Hay un antes y un después del acto del Círculo. Ahora a la candidatura de Pedro se la toma en serio", recalca un dirigente socialista del entorno de Sánchez, que atribuye las críticas de sus compañeros a la "envidia".
En el equipo de López aseguran que el 85 % de la militancia socialista no se moviliza en favor de los candidatos hasta que no llega el día de la votación, y los partidarios de Díaz defienden, en cambio, que esta puede ganar, si se presenta, con más del 50% de los votos, al tiempo que dudan de que el vasco pueda finalmente tener sitio en una campaña polarizada.
