La Policía no cree que los dos detenidos hoy en Madrid por su presunta vinculación con el terrorismo yihadista tuvieran intención de cometer atentados, según se desprende del análisis de la documentación incautada.

Según han asegurado a EFE fuentes policiales, durante toda la jornada los agentes de información han estudiado de forma exhaustiva el material en su poder y han concluido que los detenidos no tenían intención de cometer atentados terroristas.

Los dos jóvenes detenidos por agentes de la Brigada Provincial de Información de Madrid tienen entre 18 y 25 años, se habían radicalizado en Madrid y responden a un perfil "extremadamente peligroso", lo que ha motivado su arresto inmediato.

Ambos integraban una célula terrorista de segunda generación, es decir, son de nacionalidad española pero de origen o entorno marroquí. Según las fuentes, empleaban una cabaña situada en el barrio de Vallecas cerca de la autovía de Valencia (A3) y de muy difícil acceso, como punto de reunión con otros presuntos yihadistas.

Las fuentes han confirmado a Efe que la Policía ha hallado ya cuatro cargadores y más de una treintena de cartuchos de kalashnikov y sigue inspeccionando el entorno de la cabaña por si los detenidos tuvieran armas escondidas.

Se trata, por tanto, de la primera operación policial antiyihadista en España en la que se interviene este tipo de munición, la misma que han empleado los terroristas en los últimos atentados en Europa, como los perpetrados en Bruselas en marzo o los cometido el pasado año en París, tanto en la redacción de la revista satírica Charlie Hebdo como en la discoteca Bataclán.

Desde 2015, año en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el nivel de alerta antiterrorista, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 175 terroristas yihadistas.