El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, admitió ayer que "no tendría mucho sentido" que él siguiese en el puesto si los inscritos en Podemos no están de acuerdo con sus ideas y con su equipo en el congreso de Vistalegre: "Si el documento de estrategia política más importante que se presenta, el de mi equipo y mi proyecto, sale derrotado, yo no puedo seguir siendo secretario general". Las palabras coinciden con su propuesta de que en Vistalegre los proyectos políticos y organizativos se voten conjuntamente con las candidaturas, a lo que su "número dos", Íñigo Errejón, se opone. Iglesias dice que él no quiere ser "secretario general a toda costa" ni que le voten por su "cara bonita", sino solo si los inscritos están de acuerdo con su equipo y su proyecto.