El Partido Popular quiere cambiar sus estatutos en el próximo congreso nacional para elegir a su líder nacional y a los presidentes regionales y provinciales mediante un sistema de "doble vuelta": primero votarán a los candidatos todos los afiliados inscritos y después lo harán los compromisarios.

El vicesecretario de Organización del partido, Fernando Martínez-Maillo, ha presentado la propuesta que según ha dicho es mejor que las primarias y por la cual en una primera vuelta votarían todos los militantes que se hayan inscrito para participar en este proceso.

Pasarían a la segunda vuelta quienes lograsen más del 10 por ciento de los votos, y entre los cuales elegirían ya los compromisarios.

No obstante, si un candidato consigue en la primera vuelta más de la mitad de los votos, lo logra en treinta de las sesenta circunscripciones en las que se divide el partido y lo hace con quince puntos por encima del segundo, será candidato único y no habrá segunda vuelta.

De aprobarse en el congreso nacional de febrero este sistema, todos los líderes regionales y provinciales que sean elegidos en los congresos posteriores previstos para el año que viene lo harán de esta forma, aunque no será el caso del líder nacional -Mariano Rajoy es el único candidato- que será elegido en el cónclave de febrero por el método ahora vigente.

Sustanciosa renovación

Maillo ha expuesto en esta comparecencia los principales cambios de la propuesta política y de estatutos, que según ha asegurado cambia en un 67 por ciento esta norma interna del partido.

Entre las novedades destaca también la creación de un nuevo órgano interno, la "oficina del cargo popular", para prevenir los casos de corrupción entre sus miembros y denunciarlos en caso de que se produzcan.

El PP mantiene el principio de apertura de juicio oral para decidir la expulsión de uno de sus cargos aunque incluirá una excepción, la de los casos de "flagrante delito" de corrupción, y como ejemplo ha puesto el de un "caso granado", citando así de forma implícita el de el exsecretario general del PP madrileño Francisco Granados.

Según ha asegurado Maillo, la oficina del cargo popular será autónoma y estará formada por entre tres y cinco miembros que no serán cargos públicos del partido.

El vicesecretario de Organización del PP ha hecho una defensa férrea del nuevo sistema de elección de los presidentes del partido que incluye la ponencia política y que tiene que votar el congreso nacional, que se celebra en Madrid del 10 al 12 de febrero.

"No vamos a copiar el modelo de los demás, que lo hacen mal", ha subrayado el 'número tres' de los populares.

Este proceso de dos vueltas comenzará con una primera en la que pueden participar todos los militantes.

Eso sí, en el proceso no pueden participar sin más los más de 800.000 afiliados del partido: debe haber un proceso de inscripción previa con la que los afiliados dejarán constancia de que quieren participar, no sólo en la elección de su líder sino en otras partes del proceso que especifiquen, como la de estar en el congreso como compromisarios.

Aunque quien elige en última instancia al líder del partido son los compromisarios en la segunda vuelta Maillo ha insistido en subrayar que con este método se mejora notablemente el proceso de participación de los afiliados.

En cuanto al resto de cargos de la cúpula, se mantiene el sistema actual, por el cual quien sea elegido presidente en el congreso presenta una lista con treinta nombres de la que saldrán el secretario general, vicesecretarios y otros cargos que serán refrendados en un comité ejecutivo nacional posterior.

Sobre las medidas de regeneración, Fernando Martínez-Maillo ha explicado que los nuevos estatutos incluirán la llamada "declaración de idoneidad" que será el "elemento previo para pertenecer a cualquier lista" y la formarán un conjunto obligaciones, declaraciones y compromisos del cargo 'popular'.

La Oficina del Cargo Popular será la encargada de supervisar y vigilar esa idoneidad.

Este órgano pretende ser sobre todo preventivo, para que no se produzcan casos de corrupción y en caso de que así ocurra se denuncien.

Otra cosa es la capacidad sancionadora: la asesoría jurídica del partido está estudiando qué competencias tendrá la nueva oficina para que no colisionen con las del comité de derechos y garantías, encargado de tomar las medidas disciplinarias.

En la rueda de prensa, Maillo también ha explicado que la idea del PP es incluir en los estatutos el mandato de que los congresos se celebren cada cuatro años como máximo.

Además, ha señalado que en esta ponencia política el PP se definirá como "el partido que mejor se identifica con España" y hará constar los principales valores que defiende: unidad, libertad, igualdad y solidaridad.

También recogerá esta ponencia que el partido está "orgulloso" de su historia pese a sus "errores" y subrayará que sus orígenes se inspiran en los valores del humanismo cristiano y del liberalismo, que han ido "evolucionando" hasta convertir al PP en el partido de "centro reformista" que es.