El presidente del Gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, anunció ayer a la dirección del partido que el XVIII congreso nacional de la formación se celebrará el próximo mes de febrero en Madrid. El cónclave se regirá por los actuales Estatutos, así que votarán los compromisarios elegidos en cada territorio y no se aplicará la regla "un militante, un voto" que defienden algunas voces dentro del PP.

La fecha exacta de celebración del congreso la dará a conocer el próximo día 14 la junta directiva nacional. El máximo órgano decisorio del partido entre congresos nombrará un comité organizador y decidirá cuáles serán las ponencias y los ponentes, así como el número de compromisarios que acudirán.

Tras ese congreso nacional, el PP celebrará los congresos regionales y provinciales, que también van con retraso y en los que ya se aplicarán las nuevas normas de funcionamiento interno que está previsto aprobar en el cónclave de febrero, cuya gran incógnita es si la nueva ministra de Defensa, Dolores de Cospedal, seguirá como secretaria general.

Por otra parte, la vicepresidenta del Gobierno y ministra de la Presidencia, Soraya Sáenz de Santamaría, asumió ayer sus nuevas competencias en administración territorial con el objetivo de "acortar" las distancias que "puedan alejar" al nuevo Ejecutivo de Rajoy de las comunidades autónomas y "fortalecer los vínculos" que les pueden "seguir uniendo", con un método: "El diálogo y el consenso".